Inhumaron a La Raulito, un símbolo del pueblo boquense

Los restos de María Esther Duffau, conocida como La Raulito, la hincha más representativa de Boca Juniors fallecida en la víspera a los 74 años, fueron inhumados en un Cementerio privado, en medio de la congoja de los amigos xeneizes que se acercaron a darle el último adiós.

La Raulito, un ícono del sentimiento por la camiseta de Boca, fue velada en la sede del club, en La Bombonera, tal como sucedió con un gran ídolo como el futbolista brasileño Paulo Valentim, y ahora descansa en el cementerio que el club tiene en la localidad de Hudson.

Poco tiempo atrás, uno de los últimos grandes ídolos de Boca, el mellizo Guillermo Barros Schelotto (múltiple campeón con la entidad de La Ribera), junto a Rodrigo Palacio, le habían regalado una parcela en ese cementerio boquense, donde desde hoy descansan sus restos.

Nacida el 26 de julio de 1933 en el barrio porteño de Villa Urquiza, su particular historia de vida fue llevada al cine, en una película interpretada por la actriz y cantautora Marilina Ross en 1975.

El filme se llamó precisamente La Raulito y el protagonista masculino fue el actor chileno Lautaro Murúa.

Sin embargo, su participación cinematográfica había empezado mucho antes, ya que en 1948 fue extra en la película "Pelota de trapo".

"Me hubiera gustado ser macho y jugar en la primera de Boca como Diego Maradona", es la frase más recordada de La Raulito.

Precisamente el apelativo masculinizado obedeció a su apariencia, casi un mecanisno de defensa para enfrentar la vida como mujer en las calles y los reformatorios que la albergaron.

Siempre dijo que pateaba bien "con las dos piernas" y era una "buena cabeceadora".

En los últimos tiempos había sufrido una afección en el fémur de la pierna derecha que la mantenía postrada y la obligaba a desplazarse en silla de ruedas.

Hacía bastante tiempo que vivía en el Hospital Rawson y en los últimos días, cuando su enfermedad se agravó, fue trasladada al Argerich, donde era visitada por jugadores de Boca, como el goleador Martín Palermo o el arquero Pablo Migliore, entre otros.

"Me gustaría dar otra vuelta olímpica, aunque sea en silla de rudas, Boca es mi vida", fue uno de los últimos comentarios que hizo en el Argerich, donde pasó sus últimos días.

Ese deseo no podrá cumplirlo, pero se llevó en su corazón el reconocimiento que le profesó siempre la feligresía xeneize y por eso se la recordará siempre, comenzando por el domingo próximo.

Boca le prepara un homenaje el domingo, en ocasión del superclásico que animará con River Plate, por la 13ra. fecha del torneo Clausura de primera división.

En ese sentido, La 12, como se conoce a la hinchada más numerosa del país, desplegará una bandera con la leyenda "La Raulito presente" y estarán ídolos del club como Angel Clemente Rojas, Roberto Mouzo y Gabriel Batistuta, entre otros jugadores que se ganaron, como ella, el reconocimiento eterno y un lugar especial en el corazón de cada hincha de Boca.