Horror en Misiones: linyera mató y se comió a su amigo

El horrendo caso de "canibalismo" se produjo en el barrio Los Palitos, a pocos metros del autódromo de Posadas, donde un hombre cocinó a otro para luego ingerirlo. Fue detenido


La provincia de Misiones no logra salir de la conmoción por un horrendo caso de "canibalismo" en el que un linyera -que finalmente fue detenido- mató, cocinó y comió a su amigo, en el barrio Los Palitos, del Paraje San Isidro, ubicado a pocos metros del autódromo de Posadas.

Al ser detenido, el acusado (de comerse a su amigo) dijo a la policía que lo hizo porque se le había presentado un mítico personaje de leyenda, una especie de duende o gnomo de la mitología guaraní, llamado el "Yasy Yateré".

El caso fue denunciado por un testigo que aseguró haber visto al linyera comiendo parte del pie derecho del muerto, por lo que -"muy horrorizado"- decidió denunciarlo.

El caníbal fue identificado como Eliseo Nebils, de 40 años, mientras que de la víctima sólo trascendió que tenía el apellido Correa.

Los investigadores estimaron que el acusado tiene "severos problemas psíquicos" por lo que argumentaron que es posible que haya acusado del macabro hecho a un "simple personaje de leyenda".

Ese personaje es un gnomo que, según cuenta la historia, rapta a los niños, los lleva al monte donde los retiene con miel y frutas y luego los deja enredados en sus lianas.

"Se me apareció el Yasy Yaceré y me obligó a hacerlo", fue lo único que dijo el "caníbal" a los pesquisas.

Esa fue la única frase que lanzó el hombre antes de ser esposado y conducido hacia el calabozo de la comisaría seccional undécima de Posadas, según informan hoy los medios misioneros.

Los investigadores comentaron que el cadáver estaba mutilado dentro de una caja de telgopor, tapado con una carpa de plástico negro.

La cabeza se encontraba separada del cuerpo y apoyada sobre el tórax, mientras que gran parte de la pierna derecha -desde el tobillo y hasta la rodilla- había sido comida por el linyera.

Vecinos del barrio Los Patitos aseguraron que este sujeto se alimentaba con la comida -la mayoría de las veces en mal estado- que juntaba de un basural cercano y solía deambular por la zona prácticamente desnudo.

En tanto, el testigo explicó que había llegado a la casa de Correa porque este lo había invitado el día anterior a tomar mates.

Cuando llegó a la precaria vivienda fue recibido por Neblis quien le pidió que se acercara porque tenía "algo" que mostrarle. El testigo caminó hasta el interior de la propiedad y Nebils levantó un toldo de plástico, debajo del cual estaba el cuerpo mutilado del sexagenario.

"Acá está Correa", le dijo el "caníbal" mientras acariciaba la cabeza del muerto. Aterrorizado, el hombre salió corriendo de la vivienda y se dirigió a la comisaría donde radicó la denuncia del caso.

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