Otro reclamo cargado de dolor por el crimen de la joven peruana

Bajo el lema "Todos somos Sandra", organizaciones de derechos humanos, colectivos de género de la Ciudad, comisiones de género de las diferentes universidades de La Plata, amigos y vecinos realizaron ayer a la tarde una nueva jornada cultural contra la impunidad, para reclamar el esclarecimiento de la violación y asesinato de Sandra Ayala Gamboa.

Al igual que los encuentros anteriores, éste se desarrolló frente al edificio perteneciente a la ex Dirección Provincial de Rentas, ubicado en 7 entre 45 y 46, donde el cuerpo de la joven peruana fue hallado sin vida.

A lo largo de la jornada se realizó una radio abierta, una muestra sobre violencia de género y actuaron diferentes grupos artísticos. Entre ellos: Perú Tusuy, La Verdulera, Tocando Fondo, Zarpada la Vieja y Tambores Tintos.

Como se recordará, Ayala Gamboa tenía 21 años al momento del hecho y había llegado desde Perú a La Plata a fines del año 2006 para acompañar a su novio, Augusto Díaz (23). Aunque quería volverse a Ancón, su ciudad natal.

Según contó su madre, la chica tenía pensado regresar el 20 de febrero del año 2007, pero cuatro días antes, en circunstancias que aún se investigan, fue violada y ahorcada hasta su muerte.

Como se sabe, el día en que desapareció la víctima le habían ofrecido un trabajo.

Fuentes de la pesquisa indicaron que, a través de un allegado a la familia, la chica conoció a una persona que supuestamente necesitaba que le cuidaran a los hijos. Y, al parecer, pagaba 10 pesos por día.

A Sandra Mercedes Ayala Gamboa le pareció muy interesante la propuesta, más cuando estaba desocupada. Y por eso decidió conocer a su futuro empleador, quien, al parecer, según todas las hipótesis, se habría convertido en el asesino.

De todas formas, aunque parezca mentira, hasta el momento no se tienen pistas sobre su identidad y paradero.