Crece la preocupación por el recital de La Renga
Los comerciantes de avenida 32 prevén distintas medidas de seguridad ante la presentación del fin de semana
| 27 de Mayo de 2009 | 00:00

Ante la inminencia del recital que el grupo de rock "La Renga" ofrecerá en el Estadio Ciudad de La Plata, muchos comerciantes de la avenida 32 están previendo distintas medidas de seguridad para evitar saqueos y ataques vandálicos similares a los que ocurrieron en junio de 2007, la última vez que tocó en la ciudad. Así, mientras desde el Foro de Seguridad de Tolosa se pidió que se refuerce la presencia policial en el barrio y que los organizadores del evento contraten seguros por los daños que puedan causarse a terceros, hay comerciantes que prevén mudar su mercadería a un lugar más seguro, "para no tentar a los delincuentes".
Los vecinos dijeron que cuando la multitud llegue desde distintas localidades del interior, volverán a sentirse "sitiados". "Cuando se presentaron la última vez toda la zona estaba ocupada, en la rambla había carpas, caminaba gente alcoholizada por cualquier parte y hacían sus necesidades en nuestros jardines. Todo fue un verdadero desastre que no queremos que se repita", señaló María Agustina Fernández, vecina de 17 y 32.
PERDIDAS ECONOMICAS
Para los comerciantes además de la preocupación por los posibles destrozos, está el malestar por las pérdidas económicas que sufrirán a raíz de la realización del espectáculo. Ese es el caso de Carlos Alberto Ivanoff, propietario de la concesionaria de autos ubicada en 532 y 19 que, previendo cualquier ataque, mudará a otro local los 30 vehículos que tiene para la venta: "voy a alquilar un lugar y el sábado muy temprano voy a llevar allí los vehículos porque no quiero correr ningún riesgo; en el último recital no sólo nos rompieron vidrieras sino que también un vidrio cayó sobre un auto 0 KM, lo abolló y le rompió el parabrisas", contó el comerciante.
En esa oportunidad un grupo de personas que acababa de salir del recital, tiró piedras contra la vidriera del comercio, ingresó al local y si no hubiera sido por un vecino que se paró armado frente a la puerta de la concesionaria los destrozos hubieran sido mayores, contó Ivanoff.
El costo de la mudanza de los autos, las pérdidas que ocasiona tener el comercio cerrado el sábado y buena parte del lunes sin atención al público, hasta que se vuelvan a reacomodar los vehículos, son para Ivanoff algunas de las consecuencias que sufrirá por la realización del recital.
En una gomería ubicada a una cuadra de allí, en 532 y 20, Pedro Drake dijo que el sábado sacará del local toda la mercadería que está en la vidriera. "Después del último recital que dieron en La Plata tuvimos que gastar en vidrios $ 2.500 y perdimos unos $ 4.000 por el robo de llantas y cubiertas; además había sangre por todas partes porque se cortaron con los vidrios", expresó Drake.
Los vecinos dijeron que cuando la multitud llegue desde distintas localidades del interior, volverán a sentirse "sitiados". "Cuando se presentaron la última vez toda la zona estaba ocupada, en la rambla había carpas, caminaba gente alcoholizada por cualquier parte y hacían sus necesidades en nuestros jardines. Todo fue un verdadero desastre que no queremos que se repita", señaló María Agustina Fernández, vecina de 17 y 32.
PERDIDAS ECONOMICAS
Para los comerciantes además de la preocupación por los posibles destrozos, está el malestar por las pérdidas económicas que sufrirán a raíz de la realización del espectáculo. Ese es el caso de Carlos Alberto Ivanoff, propietario de la concesionaria de autos ubicada en 532 y 19 que, previendo cualquier ataque, mudará a otro local los 30 vehículos que tiene para la venta: "voy a alquilar un lugar y el sábado muy temprano voy a llevar allí los vehículos porque no quiero correr ningún riesgo; en el último recital no sólo nos rompieron vidrieras sino que también un vidrio cayó sobre un auto 0 KM, lo abolló y le rompió el parabrisas", contó el comerciante.
En esa oportunidad un grupo de personas que acababa de salir del recital, tiró piedras contra la vidriera del comercio, ingresó al local y si no hubiera sido por un vecino que se paró armado frente a la puerta de la concesionaria los destrozos hubieran sido mayores, contó Ivanoff.
El costo de la mudanza de los autos, las pérdidas que ocasiona tener el comercio cerrado el sábado y buena parte del lunes sin atención al público, hasta que se vuelvan a reacomodar los vehículos, son para Ivanoff algunas de las consecuencias que sufrirá por la realización del recital.
En una gomería ubicada a una cuadra de allí, en 532 y 20, Pedro Drake dijo que el sábado sacará del local toda la mercadería que está en la vidriera. "Después del último recital que dieron en La Plata tuvimos que gastar en vidrios $ 2.500 y perdimos unos $ 4.000 por el robo de llantas y cubiertas; además había sangre por todas partes porque se cortaron con los vidrios", expresó Drake.
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