Quejas por baja tensión de luz en otro barrio
Los vecinos de 23 bis a 27 y de 83 a 86 aseguran que tienen dificultades en viviendas y comercios
| 3 de Agosto de 2009 | 00:00
La sensación de hartazgo por los reiterados problemas con el suministro de energía eléctrica se instaló ayer en Altos de San Lorenzo. Un grupo de vecinos de la zona comprendida entre las calles 23 bis, 27, 83 y 86 salió a la calle para pedir que cesen los episodios de baja tensión que son "moneda corriente" en ese barrio del sur platense.
"Tenemos la vida trastornada por las fallas en el servicio de Edelap" aseguró Graciela de Pucheta: "desde mayo pasado, cuando este tema que ya veníamos padeciendo se agravó de golpe, la baja tensión nos obliga a hacer un montón de cosas a contraturno y en la madrugada, que es el único momento del día en que se pueden usar algunos electrodomésticos como el lavarropas".
"Si manejás un negocio, se complica mucho" admitió Roxana Ortiz, quien comercializa alimentos y bebidas: "nosotros estamos desconectando las heladeras y el freezer a las 18, para volver a encender recién a las 3; a las doce de la noche tenemos sólo 120 voltios".
Luminarias agonizantes, que convierten la calle en una boca de lobo, calefones que tardan "dos horas para calentar veinte litros de agua", y lámparas de bajo consumo que ni siquiera encienden, son parte del paisaje habitual de una zona en donde los asentamientos masivos tomaron un altísimo porcentaje de los predios que hasta no hace tanto eran descampados; los vecinos preexistentes fueron rodeados por el fuerte avance de los barrios precarios.
También son habituales las corridas hasta la unidad sanitaria que queda a varias cuadras, cuando no arrancan los nebulizadores. "Llueva o haga frío polar, hay que llevar a los nenes al Centro de Salud", precisó José Luis Pucheta.
"Edelap dice 'vamos a mandar la cuadrilla', pero evidentemente eso no soluciona nada, hace falta un trabajo de fondo" consideró Norma López: "a mí la heladera directamente se me quemó".
"Todos tenemos medidores individuales y pagamos las boletas en tiempo y forma, así que estamos más que habilitados a protestar" sostuvo Graciela Pucheta: "de hecho, logramos que viniera la gente del ENRE, que trajo los testers y midió durante tres días entre 150 y 160 voltios. Dijeron que se iba a generar una planilla para intimar a Edelap, pero pasaron dos semanas y nada".
RED "SOBRECARGADA"
Desde la empresa Edelap se atribuyeron los desperfectos al "gran número de enganchados que hay en ese sector del barrio Altos de San Lorenzo". Los voceros señalaron que "la red de distribución eléctrica se configura tomando en cuenta el consumo histórico de los clientes registrados, en una zona determinada, y las estimaciones del crecimiento del mismo. Los transformadores también se adecuan en función de estos datos, por lo que la demanda originada en el consumo no medido -'los enganchados'- sobrecarga las instalaciones y los fusibles provocando cortes por cuestiones de seguridad".
"Tenemos la vida trastornada por las fallas en el servicio de Edelap" aseguró Graciela de Pucheta: "desde mayo pasado, cuando este tema que ya veníamos padeciendo se agravó de golpe, la baja tensión nos obliga a hacer un montón de cosas a contraturno y en la madrugada, que es el único momento del día en que se pueden usar algunos electrodomésticos como el lavarropas".
"Si manejás un negocio, se complica mucho" admitió Roxana Ortiz, quien comercializa alimentos y bebidas: "nosotros estamos desconectando las heladeras y el freezer a las 18, para volver a encender recién a las 3; a las doce de la noche tenemos sólo 120 voltios".
Luminarias agonizantes, que convierten la calle en una boca de lobo, calefones que tardan "dos horas para calentar veinte litros de agua", y lámparas de bajo consumo que ni siquiera encienden, son parte del paisaje habitual de una zona en donde los asentamientos masivos tomaron un altísimo porcentaje de los predios que hasta no hace tanto eran descampados; los vecinos preexistentes fueron rodeados por el fuerte avance de los barrios precarios.
También son habituales las corridas hasta la unidad sanitaria que queda a varias cuadras, cuando no arrancan los nebulizadores. "Llueva o haga frío polar, hay que llevar a los nenes al Centro de Salud", precisó José Luis Pucheta.
"Edelap dice 'vamos a mandar la cuadrilla', pero evidentemente eso no soluciona nada, hace falta un trabajo de fondo" consideró Norma López: "a mí la heladera directamente se me quemó".
"Todos tenemos medidores individuales y pagamos las boletas en tiempo y forma, así que estamos más que habilitados a protestar" sostuvo Graciela Pucheta: "de hecho, logramos que viniera la gente del ENRE, que trajo los testers y midió durante tres días entre 150 y 160 voltios. Dijeron que se iba a generar una planilla para intimar a Edelap, pero pasaron dos semanas y nada".
RED "SOBRECARGADA"
Desde la empresa Edelap se atribuyeron los desperfectos al "gran número de enganchados que hay en ese sector del barrio Altos de San Lorenzo". Los voceros señalaron que "la red de distribución eléctrica se configura tomando en cuenta el consumo histórico de los clientes registrados, en una zona determinada, y las estimaciones del crecimiento del mismo. Los transformadores también se adecuan en función de estos datos, por lo que la demanda originada en el consumo no medido -'los enganchados'- sobrecarga las instalaciones y los fusibles provocando cortes por cuestiones de seguridad".
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