Una historia dura
| 20 de Junio de 2011 | 00:00

El matrimonio formado por Becca y Howie (Nicole Kidman y Aaron Eckhart) se rompe en mil pedazos cuando el hijo pequeño de ambos, de tan sólo cuatro años de edad, fallece en un accidente provocado por un adolescente llamado Jason (Miles Teller).
Ambos intentan superar el trauma yendo a sesiones de terapia pero Becca no puede entender que le digan que Dios necesitaba a otro ángel y por eso se ha llevado a su hijo; si es Dios, ¿por qué no fabricó a otro en su lugar? Con muchas lágrimas y dolor de por medio, empieza a encontrar consuelo donde creyó que jamás lo encontraría: en Jason, el asesino involuntario de su hijo.
Howie, sin embargo, es incapaz de asumir que el pequeño se ha marchado para siempre y se aleja cada vez más de su mujer y también de la vida real. En el fondo piensa que su hijo sigue arriba, durmiendo en su habitación, y que pronto bajará a desayunar.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE