Los Caniggia dominan el rating y Showmatch

Antes fue el turno de Charlotte, hoy es el de Alexander. Tinelli les encontró la vuelta a los "pajaritos" y con Dady Brieva le sacan jugo a la noche

Charlotte, asumida fina y distinguida, fue la noticia la semana pasada cuando Marcelo Tinelli la llevó de la mano a comer pizza con fainá, tomar una cerveza y viajar en colectivo. Luego la joven le propuso tomar un trago y jugar una prenda. El programa dio un giro inesperado y el Bailando quedó atrás para ser reemplazado por una vorágine de sucesos que comenzaron con una maratón gay y culminaron con una disco.

Hoy a la noche, la situación consistió en intentar hacer reír a Alexander, el otro hijo de Mariana Nannis y Claudio Paul Caniggia.

Y ninguno de los humoristas tuvo éxito. Pasaron Larry de Clay Matías Alé, y nada, ningún chiste pudo cambiar el rostro serio del joven.

Luego vino lo esperado por todos: la maratón gay. Y esta vez fue más producida, con obstáculos, nuevos participantes, y vestuario preparado. Hubo toboganes, cubiertas, un banco, conos y una rampa.

Allí la Nannis le aconsejó utilizar botas plateadas a Tinelli, con peluca rubia para comenzar a desfilar.

También pasaron Tito Speranza con peluca fucsia, uno de los hermanos Báez con peluca celeste, Flavio Mendoza con peluca turquesa, Aníbal Pachano con su clásico sombrero, Manuel Navarrete con peluca negra.

Entonces, con la nueva regla "no vale empujar", arrancó la competencia. No faltaron los porrazos y las trampas.

El podio fue para Flavio Mendoza, Aníbal Pachano y Báez. Cuarto fue Tito y quinto el propio Marcelo.

Una vez finalizada la maratón, se armó de nuevo una especia de boliche bailable musicalizado por DJ Piloto y regado con "Sambucca", el trago de Charlotte

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