Ultimas grandes poetas: Sylvia Plath

Por AMILCAR MORETTI

Quien conoce de poesía sabe de qué se trata cuando escucha el nombre de Sylvia Plath. Poeta norteamericana, Plath se suicidó en 1963, cuando su marido, otro escritor, Ted Hughes, la dejó. A cargo de los dos hijos de la pareja, y cuando su poesía había comenzado a ser reconocida, junto a la de Anne Sexton, como una voz diferente que destacaba en el difícil espacio de la lírica confesional, ella lleva a cabo una idea que, al parecer, siempre estuvo circundándola.

En general, los comentarios -razonables o injustos- "culparon" a Ted Hughes por sus relaciones con otras mujeres, en especial. Plath, nacida en Boston se quitó la vida en Londres cuando apenas rozaba los 30 años. El suicidio, se sabe, según Albert Camus, es el problema filosófico "central", el único digno de reflexión. Responsabilizar con ligereza a Hughes significa disminuir el drama y conflicto personal de la poetisa. Además, el viudo fue quien se encargó de editar después de la muerte su obra completa, que fue la primera en ganar un Pulizer póstumo, en 1983. Comentarios aluden a depresiones y excitaciones oscilantes en esta brillante mujer, quien al parecer nunca habría superado la muerte de su padre cuando era niña. Su hijo varón, profesor en Alaska, se suicidó en el 2003.

En fin, doy estos datos ligeros para ingresar en "Sylvia", una película con Gwyneth Paltrow y -sorprendente para algunos- Daniel Craig, conocido como el Agente 007 pero, sin duda, buen actor dramático. Ambos interpretan, respectivamente, a Sylvia Plath y Ted Hughes, con sus conflictos matrimoniales, de familia, profesionales, literarios y de pura supervivencia. En su momento, vale destacarlo, Hughes era más apreciado por la crítica que Sylvia Plath, también hoy heroína -o víctima- mencionada con frecuencia por cierta parte del feminismo.

"Sylvia" va por Films & Arts a las 22.

Otras películas

Cazador blanco, corazón negro. Película nunca del todo apreciada dirigida y protagonizada por el gran Clint Eastwood. Aquí se hace cargo de los problemas y dilemas éticos, existenciales y conflictos culturales de un cineasta que parece combinar a John Huston y Ernest Hemingway. TCM a las 19.50.

París, Texas. El recordado filme del alemán Wim Wenders de 1984, filmado en Estados Unidos. Historia de amor y recuperación de vida entre una joven interpretada por la bella Nastassja Kinski y el siempre secundario pero aquí formidable Harry Dean Stanton. Europa a las 22.

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