Fuerte reacción de Dilma: “El voto no es de nadie”

La presidenta y candidata a la reelección en Brasil, Dilma Rousseff, afirmó ayer que el apoyo de Marina Silva, la tercera más votada en la primera ronda de los comicios, a Aécio Neves no implica una transferencia “automática” de votos en la segunda vuelta ya que “el voto no es propiedad” de nadie. “El voto no es de nadie. Es de quien va a la urna y sufraga, es del ciudadano”, dijo Rousseff en rueda de prensa en San Pablo.

La mandataria pidió “respeto a la autonomía e independencia de cada ciudadano”, después de que Silva, la tercera candidata más votada en la primera vuelta de las elecciones, el pasado 5 de octubre, con 21,1 % de los sufragios, anunciara ayer su apoyo en el ballotage al abanderado del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).

Rousseff expresó que “comprende” la decisión de Silva, por su “proximidad” con las propuestas económicas de Neves y las disparidades que, según ella, guarda con los programas sociales del oficialista Partido de los Trabajadores (PT). En opinión de Rousseff, los brasileños elegirán el próximo 26 de octubre, en la segunda vuelta, entre “dos visiones”, la que ella impulsa que tiene “un compromiso con el pueblo” y la de su rival, a la que calificó de “retroceso”.

“Los que están del lado adversario representan una visión de la economía que cuando estuvo en el gobierno quebró al país tres veces”, sostuvo Rousseff, y agregó que los gobiernos del PSDB, que tuvo la Presidencia entre 1992 y 2003, estaban “en quiebra” porque las reservas de divisas eran “mucho menores” que la deuda externa.

Asimismo, la jefa de Estado indicó que las políticas económicas del PSDB causaron altas tasas de inflación y de desempleo. También destacó que si Neves gana el ballotage, estará en riesgo la continuidad de programas sociales, entre los que citó el “Mi Casa Mi Vida”, que ofrece viviendas a precios populares para los pobres.