Resurge la polémica por las cifras de la inflación

El ministro de Economía, Axel Kicillof, volvió a cuestionar ayer el índice de inflación de las consultoras que dan a conocer legisladores de la oposición al considerar que “es de escuela de dibujo” y “tiene una intencionalidad política muy clara”.

“Nuestro índice lleva acumulado 21 (por ciento), cerrará este año, no se si en 24 por ciento. Habrá que ver como evoluciona, falta noviembre y diciembre, pero aproximadamente ese numero”, calculó.

Kicillof deploró que “esto de la inflación del 40 por ciento es algo que lo vengo escuchando y no se de dónde lo sacan” y sostuvo que “todo el mundo ya está un poquito harto de tanta mentira, tanta intención de mover la cancha, para perjudicar al Gobierno y perjudicar al país”.

“Intentan instalar que es 40 por ciento con una intencionalidad política muy clara”, dijo el ministro y apuntó que “aún los índices de ellos dan en los últimos seis meses 2 por ciento por mes. Si uno toma eso, da en el año 24, 25, entonces donde está el 40?”.

“DE LA CALLE”

En respuesta a las declaraciones del jefe de la economía, el diputado radical Miguel Giubergia señaló que ese índice “lo sacamos de salir a la calle” y apuntó que “al funcionario se lo comió el relato”.

En ese sentido, el legislador dijo que “la realidad de la Rosada es la opuesta a la que viven los argentinos. Ellos buscan eludir a la justicia y los argentinos buscan llegar a fin de mes”.

En diálogo con radio Nacional Rock, Kicillof tildó de “trucho” al IPC-Congreso al alegar que “no hay un solo dato de como arman ese índice, de la metodología”.

“Yo he visto que hay una campaña de instalar la idea de que la inflación es del 40 por ciento. No tengo la más pálida idea (de donde surge esa cifra)”, se quejó.

Al respecto, remarcó que “uno promedia todas las consultoras, inclusive la de ellos y da menos, es el primer promedio en la historia que da más que los números que promedia”.

“La verdad es que es un papelón”, fustigó.

En ese contexto, criticó que esos índices de precios parecen “elaborados más en una escuela de dibujo que en una universidad de economía, a mano alzada lo hacen” y los acusó de buscar “generar pánico” e “incertidumbre”.

El ministro, de todos modos, dijo estar “dispuesto” a discutir las causas de la inflación, aunque rechazó que sea un gasto público desmedido cubierto con emisión. “Cuando dicen que hay mucha inflación porque hay mucho gasto, mucha emisión, todo eso es el mismo discurso que usaban durante toda la etapa neoliberal para tener un programa económico, y ese programa es el del ajuste”, cuestionó.

UNA VIEJA PELEA

Desde que el Instituto Nacional de Estadística y Censos fue intervenido en 2007 por el gobierno del entonces presidente Néstor Kirchner, surgieron discrepancias entre los cálculos privados y los oficiales sobre el valor del costo de vida. Y la brecha en las mediciones tanto oficiales como privadas se volvieron a reflejar este año (ver gráfico).

La situación se dio a pesar que el FMI jugó un papel determinante para que el gobierno de Cristina Kirchner presentara en febrero un nuevo índice inflacionario al aplicar una moción de censura al país por sus criticadas estadísticas.

Aunque en los primeros meses el nuevo índice oficial y el de las consultoras privadas fueron de la mano, las cifras del organismo estatal volvieron a ser muy inferiores.

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