Noche de terror para familia de Bernal

Una mujer fue golpeada y sufrió un simulacro de fusilamiento de rodillas durante un robo a su casa de Bernal, de donde un grupo de delincuentes vestidos con chalecos policiales se llevó dinero, electrodomésticos y una moto.

Fuentes policiales informaron que el hecho ocurrió en la madrugada del sábado en Pilcomayo al 1600, cuando una mujer de 60 años se encontraba durmiendo al igual que sus dos hijos y un nieto de tres años, a quien los ladrones también amenazaron con matarlo o secuestrarlo.

Aparentemente, los asaltantes contaban con el dato de que la familia había vendido una casa por 50.000 pesos e ingresaron a la propiedad tras barretear la puerta y decirles a los vecinos que se trataba de un allanamiento.

"Ellos me pedían plata, les dí, no quedaron conformes, sacan una pistola, me pegan con una pistola color aluminio, me moretonearon toda la espalda de tanto que me pegaron en el piso", relató al canal Crónica TV la dueña de casa, que se identificó como Julia.

La víctima aseguró que los asaltantes la llevaban de las habitaciones al living todo el tiempo, mientras revolvían todos los placares, cajones y levantaban los colchones en busca de más dinero, ya que creían que había una suma mayor.

"De repente, uno viene y me pone la pistola en la cabeza como para matarme, hincada de rodillas y al nene también. Uno me apunta en la cabeza, me clava la pistola, viene otro de azul y le dice `no, no lo hagas` porque ya el tipo me mataba y no estaban alcoholizados ni nada, estaban bien", relató acongojada la mujer.

Julia afirmó que los delincuentes decían que si no encontraban más dinero se iban a llevar a su nieto de tres años.

"Yo le dije: `Si sos policía llevame presa a mi y a mi hija, pero dejame al nene`, pero ahí se enojaron más y me pateaban la espalda", relató.

La mujer sostuvo que los ladrones contaban con el dato de que ella tenía el dinero porque le preguntaban: "¿A cuánto vendiste tu casa? Porque tu casa de allá es linda" y luego la amenazaron con regresar el viernes próximo por más plata.

Julia dijo que los hombres que ingresaron a su casa estaban vestidos de civil con chalecos que decían "Policía" y que uno más joven se quedó de "campana" y fue quien robó la moto Honda Twister 250 que estaba en la casa.

Manuela, hija de la mujer y estudiante en la Policía Federal, aseguró que cuando los ladrones entraron a la casa la despertaron y le tiraron una campera en la cabeza para que no los viera.

La joven, que dijo que el robo se extendió a lo largo de 45 minutos, aseguró que le pedían el arma y la placa porque pensaban que ella ya estaba en actividad y también la golpearon en la cabeza, pero con golpes de puño, y constantemente le decían que iban a matar a su hijo.

Finalmente, contó que los ladrones se llevaron televisores, celulares, una computadora, una cámara digital, ropa deportiva, zapatillas, la moto y que intentaron abrir una camioneta que tenían estacionada en la puerta, pero no lo hicieron porque los vecinos empezaron a salir.

Esos vecinos afirmaron que la banda escapó en tres autos y que habían estado meroadeando la casa los días previos.

Terminado el robo, Julia concurrió al hospital de Quilmes, donde le realizaron radiografías y curaciones por tres cortes en la cabeza, unos diez puntos en total