Mañana campestre

Luego de seis años de ausencia, Beck tiene entre manos su nuevo álbum, “Morning phase”.

Editado por Capitol Records, y con “Blue moon” como primer corte, se trata del decimosegundo disco del cantautor californiano y uno de los más esperados del 2014. Caracterizado por los críticos de la Rolling Stone estadounidense como “delicada psicodelia y cálidos ecos de vaquero cósmico”, viene cosechando elogios generalizados en influyentes medios angloparlantes como Entertainment Weekly, Pitchfork, MTV.com y Hitfix.

Precedido por un llamativo clip en el que se pudo ver, durante algo más de un minuto y medio, a una persona testeando un long play y preparándolo para la colocación de la etiqueta con los nombres del sello productor, el disco y la lista de temas, “Morning phase” retoma con inmejorables resultados el aura de folk melancólico de “Sea change”, álbum editado por Beck Hansen hace poco más de una década.

El cantautor venía trabajando con el sello Interscope, con el que realizó sus últimos tres álbumes, “Güero”, “The information” y “Modern guilt”. El repertorio del flamante disco comprende los temas “Cycle”, “Morning”, “Heart is a drum”, “Say goodbye”, la ya mencionada “Blue moon”, ”Unforgiven”, ”Wave”, ”Don’t let it go”, ”Blackbird chain”, ”Phase”, ”Turn away”, “Country down” y “Waking light”.

Anque “Morning Phase” no es una secuela directa de “Sea change”, comparte con esa obra el gusto por las cadencias pastorales, los arreglos de cuerdas de David Campbell -padre de Beck-, y fue grabado con los mismos músicos, incluyendo al baterista Joey Waronker, el tecladista Robert Manning, Jr y el guitarrista Jason Falkner.