Francia aprobó la “Ley Macron”, una reforma para flexibilizar la economía
| 17 de Febrero de 2015 | 15:13

La iniciativa contempla un conjunto de cambios que tienen por objetivo liberalizar la economía. Con un fuerte rechazo tanto de la derecha y la izquierda, busca y sin contar con los votos en la Asamblea, el gobierno decidió aprobarla sin trámite parlamentario
Acogiéndose al artículo 49.3 de su carta magna, el Gobierno de Francia aprobó el proyecto de ley de liberalización económica. Ante su dificultad para alcanzar una mayoría de votos en la Asamblea Nacional lo hizo sin someterlo a votación en el Parlamento.
La nueva "ley Macron", nombre que hace alusión a su creador, el ministro de Economía, Emmanuel Macron, fue aprobado por un procedimiento similar a una moción de confianza ante la fragilidad parlamentaria del Ejecutivo.
Se considerará aprobado salvo si se presenta una moción de censura dentro de las 24 horas siguientes y se vota en las 48 horas posteriores.
El proyecto de ley, contempla iniciativas para ampliar, de cinco a doce, los domingos en los que los comercios pueden abrir en las zonas turísticas, la desregularización de ciertas profesiones como los notarios o la liberalización de sectores como el transporte público en autobús. Se trata de uno de los pilares de las reformas económicas del Gobierno socialista del primer ministro, Manuel Valls, para el presente curso político.
"Nada nos hará renunciar, nada nos hará dar marcha atrás", declaró el primer ministro francés, Manuel Valls, al anunciar que se acogía a esa herramienta constitucional "por el interés general".
Antes, en un discurso enérgico, el ministro de Economía había defendido la llamada Ley para el crecimiento, la actividad y la igualdad de oportunidades entre abucheos de sus detractores y aplausos de sus correligionarios.
En líneas generales, desde la izquierda se critica el texto por ser demasiado liberal, mientras que la derecha juzga que el proyecto de ley no aportará un crecimiento significativo a la maltrecha economía francesa.
Los diputados de izquierda, los ecologistas y algunos de los escaños "rebeldes" del Partido Socialista (PS) habían anunciado que votarían contra el texto.
Lo mismo que el primer partido de la oposición, la conservadora Unión por un Movimiento Popular (UMP), cuyo portavoz parlamentario, Christian Jacob, calificó de "importante fracaso personal" para Valls el mostrarse "incapaz" de lograr un voto favorable a la "pequeña ley Macron" en una Asamblea Nacional con mayoría de izquierdas.
"Si utiliza usted el 49.3, la UMP interpondrá una moción de censura. Creemos que los franceses tienen derecho a votar", sostuvo Jacob minutos antes de saberse si el Ejecutivo eludiría el escrutinio parlamentario, tras 190 horas de debate parlamentario durante las últimas tres semanas.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE