¿Cómo es una película hecha por Belle & Sebastian?

Colores saturados, pequeños numeritos pop y tres jóvenes vestidos de sentimentalismo sin tapujos y preciosas prendas retro emprenden una aventura donde, en el camino a salvar el alma de la protagonista, una joven con problemas alimenticios que vive encerrada en un hospital, forman una banda.

La premisa, que podría ser un proyecto de Wes Anderson, pertenece a la película de Stuart Murdoch, “God help the girl” (“Dios ayude a la chica”), el intento del líder de Belle & Sebastian de, como canta su banda, “hacer algo bello mientras se pueda”.

La tristeza envuelve, subterfugia, cada cuadro donde vemos a los personajes en soledad: particularmente a Eve, la protagonista encarnada por Emily Browning. Eve no soporta el encierro y su enfermedad aparece casi como un síntoma de un mundo angustiante.

Pero en su escape al universo Eve encuentra la amistad que derrite aquel sentimiento inicial: como siempre en la música de Belle & Sebastian, la melancolía siempre persiste, el anhelo de un mundo que no existe (quizás que nunca existió), pero la música es el perfecto aliado para mantenerla a raya. La melancolía, a medida que avanza la liberación musical de Eve y sus amigos, se vuelve ternura.

“Pasé mucho tiempo haciendo esto, tenía que ser algo alegre”, dice Murdoch. “No iba a pasar tanto tiempo haciendo algo triste, habría sido demasiado. Así que comencé desde el punto más bajo y fuimos desde ahí”.

Buena parte de las experiencias de Eve son autobiográficas: Murdoch pasó parte de sus años veinte encerrado contra su voluntad mientras luchaba contra su síndrome de fatiga crónica, una enfermedad que aparece en el autobiográfico primer corte del nuevo disco de Belle & Sebastian. También Murdoch, cuenta la leyenda, comenzó a crear personajes y volverlos canción en aquellos días de confinamiento.

Pero, decidido a darle vuelo al filme, el músico y cineasta decidió concentrar el grueso de la película en el rol curativo que la música tiene en la vida de la protagonista. La película fue recibida con aplausos en varios festivales aunque, claro, no es apta para todo público...