Guerra contra el “piropo”: ahora lo definen como acoso callejero

“La mayoría de los acosadores considera que lo que dicen son piropos aunque sea una grosería... ¿te preguntaste a quién estás defendiendo cuando defendés al piropo?”, plantea uno de los tantos afiches que aparecieron pegados estas mañana en las calles del centro de nuestra ciudad. Junto a él pueden verse otros con frases imposibles de reproducir por su lenguaje soez. Se trata de una compilación del tipo de expresiones que muchas chicas padecen a diario al salir a la calle y que, lejos de un halago, constituyen “otra forma de violencia contra la mujer”.

Así lo entienden las integrantes de Acción Respeto, una organización civil que en la Semana Internacional Contra el Acoso Callejero lanzó ayer una campaña de concientización en nuestra ciudad. La iniciativa, que prevé también la distribución de volantes, la presencia de puestos en esquinas y la recopilación de testimonios para un documental, busca poner freno a un fenómeno mucho más generalizado y violento que lo que la mayoría de los hombres suele imaginar.

“Salimos a la calle porque no queremos que nos acosen más, porque no pedimos opinión sobre nuestro cuerpo o nuestra ropa. Porque el `piropo` es violencia y queremos respeto”, explica Baiana Accinelli, una de las impulsoras de la campaña en La Plata, quien asegura que “aunque muchos hombres creen que `no es para tanto` , realmente lo es”.

De acuerdo con una encuesta realizada por la facultad de Psicología y Relaciones Humanas de la Universidad Abierta Interamericana (UAI), un 72,4% de las mujeres consultadas reconoció haber sido sufrido recientemente en la calle alguna forma de acoso o expresión vulgar; y el 59,2 % de ellas dijo haberse sentido incómoda, intimidada e incluso violentada por la situación.

Al describir el impacto que este comportamiento tiene en las mujeres, la investigación revela que un 56% de las consultadas suele cruzar la calle cuando advierte que hay un grupo grande de hombres, que un 42,9% siente miedo a caminar sola; y que frente al acoso verbal de un desconocido, un 76,2% de las víctimas resuelve no hacer nada para librarse cuanto antes de la incomodidad que le genera la situación.