Crimen en 3 y 51: secuestraron balas y documentos de un auto

Los proyectiles son calibre 9 milímetros. Los papeles, de un Peugeot 206 como el que habría conducido el asesino de Duarte

En uno de los allanamientos realizados el viernes por el homicidio de Pablo Duarte (30), en 3 y 51, los investigadores secuestraron dos proyectiles calibre 9 milímetros y documentación vinculada con un auto de características similares al que usó el asesino para escapar tras el hecho, junto con otro hombre y dos chicas.

Todos esos elementos fueron secuestrados por detectives de la DDI en uno de los tres domicilios que pidió registrar el fiscal Marcelo Martini, en busca del arma reglamentaria del policía que está detenido desde el jueves, acusado de ser el autor material del disparo que el 23 de mayo terminó con la vida de Duarte.

La pistola calibre 9 milímetros de Rodrigo Molina (27) no fue hallada, a pesar de que este suboficial ayudante de la Policía habría dicho al entregarse que estaba en su casa, pero los efectivos se llevaron de ese domicilio de la zona Norte dos balas nueve milímetros y papeles relacionados con un Peugeot 206: “Son comprobantes de pago y una revisación mecánica”, dijo una alta fuente con acceso a la causa, aclarando que “figuran a nombre de otra persona”.

El vehículo en cuestión tampoco estaba en la propiedad, pero los pesquisas confían en poder vincularlo con el acusado.

Mientras tanto, se espera que se defina la situación procesal del hermanastro de Molina, otro policía que está imputado de “encubrimiento agravado” y aún no fue detenido. Es que la defensa presentó un recurso de hábeas corpus que puso a su captura en stand by.

Hasta su procesamiento Molina prestaba servicios en una comisaría de Lanús, mientras que su hermanastro lo hacía en una de Quilmes. Los dos fueron desafectados de servicio.

El crimen ocurrió después de que la víctima y su grupo de allegados descorcharon una botella de champagne dentro del bar de 4 y 51. Salpicaron por accidente a dos hombres que estaban con un par de chicas al lado. Pelearon. Los retiró personal de seguridad. Y, ya en la calle, Duarte habría perseguido a su atacante hasta la esquina de 3 y 51, frente al ministerio de Seguridad. El homicida sacó de un auto una pistola y efectuó tres tiros, uno de los cuales pegó en el pecho de la víctima, matándola casi en el acto. El joven murió antes de llegar al hospital San Martín.

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