Aprender actividades nuevas, una fórmula para sentirse mejor

A cualquier edad, aprender a realizar algo nuevo no solo es posible sino que, de acuerdo a estudios recientes, le aporta al individuo un sinnúmero de beneficios tanto a nivel intelectual como social.

Claro que muchas veces la rutina va generando en muchas personas conductas rígidas, y esto hace que les impida aprender actividades y hábitos nuevos.

“El aprendizaje -explica el licenciado Santiago Gómez, director del Centro de Psicología Cognitiva- es un proceso de construcción en el cual el sujeto ocupa un rol activo en la interacción con el medio. Por lo tanto, va a depender del interés, del deseo y de la decisión de cada uno para la elección de nuevas actividades y desafíos, como puede ser aprender un idioma nuevo; arte; música; habilidades manuales; deportes nuevos; etc. Pero para poder realizar cualquier aprendizaje nuevo, la persona tiene que salir de su estado de comodidad que le da cierta seguridad, pero que no le permite crecer como ser humano”.

Y mientras los estudios muestran que los sujetos que están abiertos y predispuestos a realizar aprendizajes nuevos reciben distintos beneficios, para concretarlos es necesario tener en cuenta algunos factores.

“Entre ellos -remarca Gomez- es importante enfrentarse a los nuevos aprendizajes con una estructura de pensamiento flexible en la visión e interpretación de los hechos para poder realizar cambios en el comportamiento”.

Y si bien a algunas edades resulta más difícil enfrentar nuevos desafíos para aprender, los especialistas sostienen que siempre y a cualquier edad se puede comenzar.

“Comenzar una nueva actividad siempre cuesta, pero una vez que se hace el esfuerzo y se logra concretar un nuevo emprendimiento -sostiene Gomez- no resulta tan dificultoso como se imaginaba, y los beneficios que se obtienen pagan con creces el esfuerzo”.