Se agrava la crisis fronteriza entre Colombia y Venezuela

Tras fracasar en su intento por llevar la disputa con Venezuela al seno de la OEA, Colombia no descartó ayer recurrir al Consejo de Derechos Humanos de la ONU para denunciar al país vecino por la deportación de más de un millar de sus connacionales. En los últimos 13 días, más de 1.000 colombianos fueron expulsados o deportados de Venezuela y se calcula que otros 10.000 que residían de forma irregular dejaron el país por miedo a represalias.

El lunes, Colombia consiguió en la OEA sólo 17 de los 18 votos necesarios para que el tema fuera discutido por los cancilleres de los países miembros. Las relaciones entre Caracas y Bogotá entraron en crisis luego de que Maduro resolviera a partir del 20 de agosto el cierre de algunos pasos fronterizos en Táchira a raíz del ataque que sufrieron tres militares y un conductor civil cuando realizaban actividades de combate al contrabando. Ambos gobiernos llamaron el 27 de agosto a consultas a sus respectivos embajadores.

Ayer entró en vigencia un decreto de Maduro que extendió el estado de excepción a cuatro municipios fronterizos de Táchira, con lo que llegaron a 10 las localidades bajo estado de excepción por 60 días, prorrogable por otros dos meses. La medida implica la suspensión de algunas garantías constitucionales como la de reunión, manifestación en las calles y libre tránsito.