La ONU advierte que el triunfo de Trump sería un “peligro global”

GINEBRA.- Si resulta elegido, el candidato republicano a la presidencia de EE UU, Donald Trump, sería “peligroso desde un punto de vista internacional”, según opinó ayer el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, reiterando su declaración reciente sobre “demagogos populistas” que le valió una reprimenda del embajador ruso en la ONU.

En una conferencia de prensa en la que se refirió a diversos asuntos como Yemen, Siria y el Africa subsahariana, el funcionario expresó que algunas de las declaraciones del empresario estadounidense son “profundamente inquietantes y perturbadoras para mí”, especialmente las relativas a la tortura y a “comunidades vulnerables”. “Si Donald Trump resulta elegido, sobre la base de lo que ya ha dicho y a menos que eso cambie, creo que no cabe duda de que sería peligroso desde un punto de vista internacional”, dijo Zeid en Ginebra.

Las declaraciones de Zeid, un príncipe jordano, probablemente generen polémica en círculos de la ONU sobre si se extralimitó en sus declaraciones sobre un candidato presidencial estadounidense y líderes nacionalistas y xenófobos en ciertas partes de Europa.

El martes, el embajador ruso ante la ONU en Nueva York, Vitaly Churkin, indicó que Zeid no debería criticar a jefes de Estado o Gobierno extranjeros por sus políticas. “No es asunto suyo. Debería concentrarse en sus responsabilidades específicas”, afirmó.

Zeid aludió a un reporte que la agencia de noticias Associated Press divulgó el último viernes, apuntando que el mes pasado Churkin elevó una queja formal al secretario general de la ONU sobre las declaraciones de Zeid en la que dijo: “Desde luego, yo no estaba ahí y no se me presentó un demarche (informe formal)”.

El jefe de Derechos Humanos continuó el debate públicamente. Si bien reconoció que las normas de la ONU le exigen que no intervenga en asuntos que son de “jurisdicción interior de los Estados”, Zeid aludió a quejas similares de interferencia que solía hacer la Sudáfrica del apartheid y que la Asamblea General de la ONU rechazó “una y otra vez”.

En este marco, el funcionario de la ONU pareció lamentar la disminución de reacción pública a personajes intransigentes con retóricas peligrosas. “Cuando hablamos de acciones y declaraciones de algunos demagogos populistas, está claro que estamos viendo un ambiente permisivo en el que estas declaraciones ocurren sin que haya el tipo de clamor y reacción que solía ser común”, agregó Zeid.

Con respecto a las elecciones estadounidenses del próximo 8 de noviembre, Zeid precisó: “Claramente no tengo interés ni intención de interferir en ninguna campaña política en ningún país determinado”. Sin embargo, añadió que se sintió obligado a hablar ante insinuaciones de Trump que apuntan a una “posibilidad” de aumentar “el empleo de la tortura”, algo que está prohibido por la Convención contra la Tortura.

El candidato republicano ha defendido en varios actos el uso de estas técnicas en la lucha contra el terrorismo. Durante un mitin en Ohio en junio pasado, poco después del atentado en el aeropuerto de Estambul (Turquía) en el que murieron más de 40 personas, Trump aseguró que le gustaba la práctica conocida como “waterboarding” (o ahogamiento simulado), que fue prohibida por la administración de George W. Bush en 2006.