Pegó la vuelta

Por

Adrian d’amelio

informe

E l capitán y uno de los jugadores más experimentados del plantel de caballeros de Universitario, Gonzalo Campaña le dijo ayer a este medio que “la casa está en orden” con el regreso de la “U” a la División de Honor, la máxima categoría del vóley metropolitano.

Universitario selló el regreso el pasado miércoles por la noche, cuando en el barrio de Mataderos superó como visitante a su par de Glorias Argentinas 3 a 0, en la última jornada del torneo, que otorgaba dos ascensos directos. El restante quedó en manos de Náutico Hacoaj, que lo consiguió varias fechas antes.

Para Universitario obtener este ascenso, que lo vuelve a poner en la elite del vóley metropolitano, fue sacarse una espina que tenía clavada desde el año pasado, cuando sufrió un descenso traumático, que ni siquiera se dio en la cancha, sino que tuvo lugar en los escritorios de la Federación.

“Fue algo muy feo lo que nos ocurrió. Perder la categoría de la forma en que nos sucedió nos pegó duro. Todo tuvo que ver con un partido contra Italiano que perdimos tres a dos como locales, pero ese día se encargó de confeccionar la planilla alguien que no estaba habilitado y como consecuencia de eso nos restaron puntos, que significaron nuestro descenso”, comenta el entrenador venezolano Ronald Sarti, otrora un gran jugador de la “U”, que lleva dos décadas radicado en nuestro país.

Claro que en Universitario hoy por hoy es todo alegría y felicidad, ya que con este ascenso se logró cerrar una herida que había quedo abierta por espacio de un año. “Era una cuenta que teníamos pendiente y por suerte se nos dio, pero como dice el dicho ‘no hay mal que por bien no venga’, ya que al jugar en esta categoría el plantel fue madurando. Es mucho más fácil sostener un crecimiento sostenido con triunfos. Aunque no nos resultó fácil debido a que tuvimos que pelear el segundo ascenso directo con tres o cuatro equipos”, recalca Campaña, “viejo gladiador” del vóley de Universitario.

Ronald Sarti rodeó a un equipo que en su gran mayoría está conformado por valores juveniles surgidos de la divisiones menores de Universitario, con otros jugadores de experiencia para encontrar el equilibrio ideal.

“Creo que el entrenador supo poner el balance justo en el plantel, ya que los jugadores de experiencia nos transmitieron sus conocimientos, pero además nos dieron tranquilidad en los momentos más difíciles en un mismo partido o tras la disputa de otro”, reconoció Agustín Rosales, el central de 21 años, que es uno de los valores más jóvenes de los que se nutrió el equipo de la “U”.

Sin lugar a dudas, Universitario transformó en una verdadera “fortaleza” el gimnasio de la sede social de calle 46, ya que nadie le pudo ganar como local. “El hecho de hacernos fuertes en nuestra casa resultó un elemento vital en un torneo duro y parejo como es el de la Primera División Metropolitana. Inclusive, acá en La Plata le quitamos el invicto a Hacoaj, el otro equipo que junto a nosotros consiguió el ascenso directo”, remarca Campaña con una gran gesto de satisfacción.

Más adelante el capitán de Universitario siguió diciendo que “a mi criterio, el equipo se encargó de dar una prueba de carácter tras las derrota que sufrimos como visitante ante Bella Vista, que venía peleando el ascenso con nosotros. Tras ese partido el plantel se podría haber caído moralmente, pero sucedió todo lo contrario, porque supo mantener la mente fría y así ganamos en fila los últimos ocho partidos del certamen; inclusive al propio Bella Vista en la revancha, a quien superamos de local tres a dos en la penúltima fecha”.

Por último, Gonzalo Campaña -la voz cantante de este grupo de jugadores, que volvió a la “U” por un pedido exclusivo de Ronald Sarti, sostuvo que “todo este aprendizaje que tuvimos durante este año tiene que dar sus frutos el año próximo, cuando volvamos a jugar en División de Honor. Pero además los más jóvenes tendrán que ir tomando la posta de los veteranos para que el vóley de Universitario siga creciendo”, cerró.