Gran fiesta de los hinchas en el Fortín

Por RODRIGO CHAGARAY
SENSACIONES

Ya en la semana, con la notificación previa por parte de la Unión Argentina de Rugby, que no había más localidades a la venta, se vislumbró que el acompañamiento del público iba a ser sensacional. Y vaya que lo fue, porque al partido más esperado por el público argentino, lo acompañó una multitud en este que fue, el encuentro 28 del historial entre la Argentina y Nueva Zelanda.

Más allá de todas las camiseta argentinas, que estuvieron por donde uno mire, los representantes de los distintos clubes de la URBA, como así también de los distintos clubes de las uniones del Interior del país. Es así que se vieron banderas con... Biguá de Mar del Plata, Natación y Gimnasia de Tucumán, Cardenales, Marabunta RC, Patoruzú Rugby Club y de Ushuaia RC, Universitario de Salta, Los Matreros, Hindú, el SIC, Pueyrredón entre tantas otras.

UNA GRAN PREVIA

Este de ayer, fue la cuarta vez en la historia que se dio este encuentro en la cancha de Vélez, tras los dos partidos de la serie de 1991 y el último enfrentamiento en esta cancha entre ambos, en junio de 2006. Por eso la espera de Pumas-All Blacks jugando en la ciudad de Buenos Aires, fue para el público porteño, eterna. Es que desde aquel lejano mes de junio de 2006, el mismo día que Maxi Rodríguez hizo un tremendo gol en el Mundial de fútbol de Alemania frente a México; los famosísimos Hombres de Negro, cada vez que regresaron a nuestro país, lo hicieron para jugar en el Estadio Único de nuestra ciudad.

Por eso, el espectáculo de la gente fue sencillamente espectacular; primero en una Fan Zone que desbordó desde muy temprano con todo el colorido de los sponsors y distintos entretenimientos, obviamente todos relacionados con la ovalada y con los colores celeste y blanco de la camiseta argentina.

Ahí se los pudo ver a los representantes de San Luis, primero a Daniel y Eliseo Valledor, asimismo otros azulgranas como por ejemplo Bernardo, Felipe y Pato Mendy que junto a Salvador y Gerardo Villadeamigo disfrutaron del evento y no se lo quisieron perder. También en la Zona del Fan Zone, que estuvo ubicado detrás de la cabecera que da a la Avenida J. B Justo, se lo vio a Patricio Plaché de Universitario. Otros hinchas de nuestra ciudad fueron Lucas, Mateo y Bautista, todos ellos de Los Tilos; y también desde el Barrio Obrero acompañaron Joaquín y Daniel Liotard.

Otros simpatizantes de nuestra ciudad que se acercaron hasta Liniers fueron Karina Heredia y Leo Soibezon junto a Martín y Lola Pompeo, todos ellos de La Plata Rugby y Albatros. Y justamente a otro de los del club de Hernández que estuvieron, se lo vio también a Gustavo Krause.

Y claro, todo en medio de una muchedumbre, que “hormigueó” los alrededores de la cancha desde muy temprano y los primeros griteríos arrancaron a eso de las 17:15, que fue cuando llegó el micro que trasladó a Los Pumas desde la concentración de Pilar hasta el José Amalfitani. Porque fue una locura el arribo del conjunto del Daniel Hourcade, directamente el ómnibus fue rodeado por la muchedumbre y tuvo un buen rato hasta que finalmente pudo ingresar.

EMOCION, HIMNOS Y HAKA

Ya una vez dentro del estadio, las tribunas, los palcos y las plateas mostraron una postal increíble como hacía rato no se veía por estos lados. Y uno de los momentos cumbres de la tardecita-noche en Liniers, llegó con la entonación del Himno Nacional Argentino por parte del artista no vidente Nahuel Pennisi; al instante que en la zona de las plateas que dan la espalda a la autopista, miles de personas sacaron carteles con los colores celeste y blanco, armando una bandera argentina imaginaria gigante que destiló emoción con cada estrofa que el cantautor folklórico -nominado a los Premios Grammy- regaló con su angelical voz.

Después llegó el tan esperado y muy aplaudido Haka, que fue escuchado en silencio y que fue cerrado con una catarata de aplausos por todos los presentes y por una cantidad enorme de neozelandeses impecablemente vestidos con los colores de su selección que sonrieron a más no poder con el primer tiempo de los All Blacks, que fue todo un show de los Hombres de Negro en cancha, donde mostraron todo su potencial para el del delirio de sus seguidores.

El entretiempo, estuvo signado por una espectáculo de tambores y timbales muy colorido que fue cerrado por un show de fuegos artificiales y un homenaje al recientemente fallecido, Angel “Papuchi” Guastella, padre fundador de Los Pumas de 1965; en una jornada que como fue dicho anteriormente, fue sencillamente espectacular.