“El fútbol no sólo es hacer cuatro goles y tirar caños”

Por MARTIN CABRERA

Al salir de su casa pasa un auto que le toca un bocinazo. Dos chicos que justo pasaban por la calle lo reconocen y le piden un autógrafo. Su hijo Fidel lo mira y le marca el reloj: es la hora de la escuela. “Dale, vamos”, dice.

Israel Damonte, volante y figura de este Estudiantes puntero e invicto del campeonato, comparte con este medio el recorrido hasta el colegio. Son tres cuadras de ida y tres de regreso. Un puñado de minutos para hablar de la victoria ante San Lorenzo, los goles, su presente en el equipo y las críticas recibidas por la forma de jugar.

-¿Cómo se vive el día después de un triunfo tan importante?

-La verdad que muy lindo. Es muy gratificante. Ahora lo puedo disfrutar. Salió muy bien lo que planteamos y lo que nos pidió el entrenador. En el primer tiempo pudimos controlar a San Lorenzo, no lo dejamos gestar ni armar juego en los lugares que ellos te lastiman. Tuvieron muy pocas oportunidades: la de (Sebastián) Blanco en el gol que es un error mío y un par de jugadas con pelota parada en el final.

-¿Qué te produce que se hable de Estudiantes como el antifútbol porque jugó con tres número 5?

-No me genera nada porque uno está acostumbrado a esa gente que no le gusta nuestro fútbol. ¿Qué pretendían, que vayamos a la cancha de San Lorenzo a ganarle 4-0, con cinco caños a Belluschi, cuatro a Ortigoza y tres sombreritos a Blandi? El fútbol no es eso, es defender bien, ser inteligente, conocer las virtudes del rival y sus falencias.

-¿En qué lo superó Estudiantes?

-En los nombres ellos tienen más jerarquía que nosotros, pero nosotros como equipo somos muy buenos. Los lastimamos por los costados como lo hicimos en el primer gol, encontrando la manera de cubrir los espacios y controlando a los jugadores de buen pie. Además de todo eso teníamos que atacarlos, porque quedó claro que fuimos a ganar.

-¿Y cuando la crítica llega de parte del periodismo o de colegas?

-Ahí me molesta un poco más. Pero entiendo que también hay intereses en el medio con los que hay que saber convivir. ¿Antifútbol? Por favor, cuántas pavadas. Ojalá hubiera sido parte de esa época gloriosa de Estudiantes.

-¿Sufrieron más de la cuenta?

-Puede ser, porque cuando nos pusimos 2-1 no supimos o no pudimos liquidar el partido. Tuvimos unas contras en las que respondió muy bien Torrico o los defensores de ellos, que muchas veces quedaron mano a mano con nosotros. Pero el fútbol es así, tuvimos que aguantar las pelotas paradas del final. Esta vez nos alcanzó.

-¿Cómo te sentiste en lo personal, ya que jugaste en varias posiciones durante el partido?

-El partido mío fue especial. Al principio me costó encontrar la pelota, porque San Lorenzo nos esperó en el medio, un lugar donde querían que metiéramos la pelota. No estoy tan acostumbrado a recibir ahí, de espaldas y con la marca encima. Pero yo me siento cómodo estando adentro del equipo. Trato de aportar lo que pueda, a veces con pelota y otras veces con participación cubriendo espacios. En el primer tiempo tal vez no estuve tan fino con la pelota pero en el segundo me paré más atrás, tuvimos más espacios por la expulsión de Mussis y mejoré con la pelota. Eso ayudó a que el equipo no tuviera transiciones.

“En el año 2005, en Jujuy y jugando para Gimnasia, hice cinco goles y todos fueron en las primeras fechas. Son rachas”

-¿Schunke te vio solo por el segundo palo y por eso tiró el centro ahí?

-(se sonríe) El Flaco me dijo en el vestuario que buscó un centro al segundo palo, pero sinceramente no me había visto tan solo. Por suerte estaba sin marca y cuando vi la pelota me tiré de cabeza.

-Tres goles, goleador del torneo y dos goles consecutivos ¡de cabeza! ¿Qué está pasando?

- Ja, ja. Pero no es la primera vez que me pasa. En el año 2005, en Jujuy y jugando para Gimnasia, hice cinco goles y todos fueron en las primeras fechas. Lo único que no recuerdo es si fueron consecutivos, pero estuve primero en la tabla de goleadores una fecha. Fue el torneo que más goles hice y lo recuerdo mucho porque fue el año que me asenté en Primera, pude jugar y sentirme importante. Ahora me pasa algo parecido, me siento bien y te puedo decir que jugué tres partidos en el torneo y metí tres goles. Es lindo y sé que son rachas. Lo importante es aprovecharlas y obviamente son esos momentos que la pelota te cae justo donde estas. Repito, hay que aprovechar estos momentos, porque en el fútbol son más los tristes o feos que los lindos. Este año me pasaron muchas cosas lindas, estoy disfrutando y jugar con amigos en mi club, , disfrutar de esta camiseta y estar al lado de los campeones de América es un orgullo.

-¿Por qué asumís el error en el gol de San Lorenzo?

-Porque es un error mío en el gol. Es arriesgado, pero si le digo a Nahuel (Losada) que le pegue para arriba, no hablaría de la idea que entrenamos. El error es mío. Yo se la pido y la hice mal. Esta clase de equipos no te perdona.

-¿San Lorenzo fue la prueba que necesitaban para recibirse de gran equipo o no lo toman así?

-No, hay que estar tranquilos. Creo que somos un buen equipo pero no por haberle ganado a San Lorenzo. Lo venimos demostrando desde el torneo anterior, el año pasado y más atrás también. Siempre estamos ahí. A veces nos puede faltar un poco pero ahora venimos bien. Igual hay que mantener la calma porque recién van siete fechas. Estaría bueno que fuese un torneo corto de 19 fechas, pero es largo.

-¿Cómo tienen que hacer para que no los desborde la presión, teniendo en cuenta que van primeros con seis triunfos y un empate?

-El torneo es larguísimo. Falta un montón y recién van siete fechas. Hay que sumar la mayor cantidad de puntos posibles e ir partido a partido. Ahora tenemos a Racing y no hay mucho para disfrutar. Imagino un partido igual o más complicado que el de San Lorenzo. Al final del año veremos dónde quedamos sabiendo que el año que viene tenemos la Copa Libertadores. Por suerte será anual y eso nos va a quitar la seguidilla de partidos en el primer tramo. Eso puedo favorecer porque no tenemos un plantel tan grande. No tenemos el recambio que tienen Boca, River, San Lorenzo ni Racing. Ellos tienen mucha billetera y recambio. El nuestro es bueno con chicos trabajadores pero no tan notorio como los otros. Estamos muy tranquilos, sin volvernos locos y sabiendo que hay que sumar. Si se puede jugar bien, mejor, pero lo importante es ganar.

-¿Es tu mejor momento desde que volviste a Estudiantes?

-Me siento cómodo, estoy en un momento en el que estoy mas tranquilo. He tenido buenos entrenadores como Pellegrino, como Gabriel y ahora tenemos un entrenador muy capacitado. Estoy en el club que quiero, tengo muchos amigos, conozco a la gente del club, estoy en un momento lindo. Y juego en un buen equipo. Es lindo ser parte de un equipo y disfruto de eso. Quiero terminar acá, retirarme acá y disfrutar cada partido como si fuera el último.