Agua salada: juntan mil firmas para que Absa deje de cobrar el servicio

Mientras el agua siga saliendo de las canillas con niveles excesivos de sodio -que la vuelven “intomable”- la empresa Absa “debería abstenerse de cobrar por el servicio”. Eso es lo que reclaman al menos mil vecinos de Villa Castells y Gonnet, quienes firmaron un petitorio para que la distribuidora se abstenga de seguir cobrando “por un suministro que no brinda”, denunciaron.

Tras la fallida reunión del jueves pasado en la delegación comunal, de la que iban a participar -además de los vecinos- las autoridades de Absa, de la Provincia y del Municipio, los frentistas que dan pelea contra el agua saturada de cloruro de sodio siguen movilizados.

Durante toda la semana estuvieron recolectando firmas en Villa Castells. Claudia Delle, vecina de 11 y 497, contó que ya llegaron a las mil y van por más. Pegaron carteles en comercios de la localidad y crearon un grupo de facebook, “Vecinos por el agua”, a través del cual encauzan el reclamo en forma colectiva.

La vecina comentó que la intención es presentar ese petitorio, con el aval de las mil firmas, o bien en el marco de la causa que lleva adelante el Juzgado de Faltas Nº 2 a cargo de Dante Rusconi, o bien ante la Defensoría del Pueblo bonaerense. “Eso lo definiremos mañana”, dijo, en alusión a la reunión que está pautada para hoy a las 19 en la delegación comunal. Se trata del cónclave suspendido, a última hora, el jueves pasado.

“Estamos juntando firmas para que directamente no se cobre por el servicio hasta que el agua sea potable. Porque si bien están entregando envasada, ellos cobran por un servicio de agua potable de red”, enfatizaron.

Como ha venido informando este medio, entre los vecinos crece el malestar, ya que ven dilatarse “demasiado” la solución a una deficiencia preocupante en el servicio de agua corriente de las inmediaciones de la República de los Niños (comprendida por las calles 487, 496, 15 y 21) y zonas de Villa Castells (entre el Camino Centenario y las calles 2, 505 y 489), admitida por Absa y comprobada por la Justicia de Faltas municipal. El juez Rusconi falló en favor de los usuarios damnificados y obligó a la empresa a cargo de los servicios sanitarios a realizar las obras necesarias para la recuperación de la calidad del suministro y a entregar, en tanto no resuelva el problema de fondo, agua envasada a los vecinos.

Sobre ese operativo de entrega de bidones los frentistas también han planteado cuestionamientos. “Se hace de lunes a viernes, en un horario muy limitado, y hay gente a la que se le complica venir y termina comprando agua por su cuenta”, indicaron el jueves pasado, tras la truncada reunión.

La única forma de dar una solución definitiva, según el concesionario del servicio, sería mediante la construcción de un acueducto para llevar “agua superficial tratada” a esos barrios ya que la que se suministra en la actualidad proviene de pozos que se encuentran contaminados por un frente salino que avanza desde el Río de la Plata y afecta las napas.

El acueducto que debería construirse tendría una traza, en su primera etapa, que iría desde Diagonal 74 y 122 hasta una estación de almacenamiento y bombeo ubicada en Villa Castells, desde donde se abastecería la zona de Gonnet.

El costo de esta obra demandaría unos 88 millones de pesos. Luego la traza del acueducto debería extenderse hacia las localidades de City Bell y Villa Elisa.