“Al entrar a la cancha, sentí que volvía a jugar en mi casa”

Por WALTER EPISCOPO
REPORTAJE

Sebastián Romero volvió a jugar oficialmente en el Bosque con la camiseta de Gimnasia nada menos que en el clásico. Tantas veces soñó con vivirlo nuevamente desde adentro, que ese día por fin llegó. Y jugó con tantas ganas que terminó siendo el mejor del equipo de Gustavo Alfaro , con sus 38 años a cuestas.

Cansado pero feliz, el volante Tripero aprovechó la jornada de ayer para descansar y disfrutar alguna salida familiar. Igualmente, se hizo de un rato para hablar y dejar algunos conceptos de lo ocurrido en el clásico jugado en el Bosque.

Y Chirola comenzó resaltando la importancia del sentido de pertenencia que hay en el grupo. “La mayoría de los que jugaron salieron del Club y saben lo que significa jugar un clásico, o ya llevan un tiempo acá y lo entienden muy bien también” , afirmó.

Ante la consulta sobre las sensaciones cuando la gente lo ovaciona, con una gran sonrisa dice, “es muy lindo que te ovacionen. Más allá de ser hincha del Lobo, trato de brindarme al máximo en cada partido por esta camiseta. Siento que todo esto es un regalo de la vida” , agrega con los ojos vidriosos el inspirador de varias banderas que suelen verse en el Bosque desde hace tiempo, aún cuando defendía las camisetas de Banfield y Quilmes. ¿Por ejemplo? “Chirola es Gimnasia” o “Nadie podrá matarte en mi alma” , con un enorme dibujo del volante gritando un gol.

“QUERIAMOS GANAR Y NO SE PUDO”

Interiormente sabe que dio todo lo que tenía, “terminé fusilado... muy cansado” , agrega sonriendo, y enseguida se mete con lo ocurrido en la cancha. “La verdad es que me quedé con mucha bronca porque soñábamos con ganar este partido para darle una alegría a la gente, pero no se pudo dar. Todos queríamos ganar y no se pudo, tratamos de hacer las cosas lo mejor posible” , confiesa, y enseguida remata, “por ahí nos faltó un cambio de ritmo. Estos son partidos complicados y cuesta muchas veces llegar, y creo que tampoco tuvimos muchas chances de gol. Después, los clásicos se juegan a morir, corriendo, metiendo y eso no puede faltar. Por eso me quedo con el carácter y el compromiso de los muchachos” .

Por su bajo perfil, no le gusta hablar de el, pero sabe íntimamente que hizo un buen partido. “En ese momento estás metido en el partido y tratás de hacer las cosas lo mejor posible, uno quiere rendir y ganar, otra cosa no pensás” , cuenta. Sobre lo que siente cuando el hincha grita “Chirooola, Chirooola” , con timidez señala, “lo de la gente es increíble, no tengo palabras para agradecerle tanto cariño. Siento un agradecimiento eterno. Qué más puedo pedir, por eso trato de disfrutar este momento al máximo” .

Tras 6 años Romero volvió a jugar oficialmente con su amada camiseta azul y blanca ante Arsenal, y fue ante el Pincha que lo hizo otra vez en 60 y 118. Asegura que fue muy especial, por que esta es su tercera etapa en el Club donde empezó a jugar a los 5 años. “Juego al máximo porque sé que no voy a tener muchas posibilidades más de jugar un clásico” , dice. “Al entrar a la cancha, sentí que volvía a jugar en mi casa” .

Hoy tiene como meta tratar de seguir sumando para el equipo, hacer una buena campaña, pero no se olvida del compromiso por los Octavos de final de la Copa Argentina, ante Racing. “Esa es una linda posibilidad que tenemos todos los gimnasistas para seguir creciendo en esa Copa” , afirma.

Chirola , a sus 38 años, sueña y va por más...