El joven que cayó por Facebook no estuvo ni 24 horas detenido

Por un vacío legal, el adolescente acusado de robarle la moto a una chica, que lo contactó a través de la red social Facebook y, mediante un juego de seducción, logró que aceptara una cita en la rotonda de 32 y 120, donde lo estaba esperando un grupo de policías encubierto, no estuvo ni 24 horas detenido.

Según contaron a este diario fuentes calificadas, esa situación se desencadenó porque el expediente está en tránsito, desde la fiscalía de Autores Ignorados de La Plata, que previno en la causa, hacia el Fuero de Menores, que será el encargado de controlar el proceso.

Los mismos voceros indicaron que, al momento de la captura, como todavía no se había confirmado la declinatoria de instancia de una dependencia judicial a la otra, el imputado “tuvo que ser soltado”.

Cabe recordar que se trata de un joven de 16 años, que es imputable para la ley, y que además contaría en su haber con un importante prontuario penal.

De todas formas, la UFI de Autores Ignorados (que es para imputados adultos) no puede intervenir en un expediente donde se haya probado la participación de un menor de edad, como fue este caso.

Inexorablemente, deberá pasarlo para su tramitación al fuero juvenil, cuyos representantes deberán entonces sostener la acusación y, eventualmente, requerir una detención.

Ese será el caso del fiscal Juan Benavides, que es el que estaba de turno al momento en que ocurrió el robo: el 25 de septiembre pasado.

Como este diario adelantó en su edición anterior, una chica que viajaba en moto llegó a una esquina sin imaginar que iban a ser blanco de una violenta banda de ladrones. Hubo tiros, golpes y los delincuentes se salieron con la suya, aunque ellos tampoco imaginaron que uno iba a caer por una trampa virtual.

Es que la víctima lo identificó en una red social, lo sedujo y convenció de encontrarse con ella.

En definitiva, el ladrón terminó preso -por unas horas- y la chica recuperó la moto que le habían robado, ya que, aunque parezca de película, en ese rodado llegó el adolescente al encuentro.

Por lo que contaron fuentes policiales, esta increíble historia arrancó cuando siete jóvenes circulaban en tres motos por diagonal 74. Al llegar a las vías de boulevard 83, los atacó una bandita de pibes.

“Mencionaron que serían entre 4 y 5, algunos de ellos menores y con armas”, según comentó un investigador. En ese lugar hay semáforos, por lo que se estima que los delincuentes aprovecharon la luz roja para hacer de las suyas. Una de las motos logró alejarse, pero las otros dos no.

Un joven que estaba entre los damnificados intentó resistirse, hasta que los ladrones hicieron tres disparos que, increíblemente, no lastimaron a nadie. A una chica de 20 años “la golpearon y le pusieron un arma en el pecho”, logrando así apoderarse de su Honda Titán de color azul, amplió la misma fuente. Entonces, sí, los agresores huyeron.

La dueña de la Titán radicó la denuncia policial, pero, en simultáneo, decidió buscar a los ladrones por su cuenta, en un territorio que casi todos los jóvenes conocen a la perfección: las redes sociales.

“Comenzó a realizar búsquedas en la página de Facebook, en algunos perfiles de jóvenes de la zona donde ocurrió el hecho, logrando dar con el sujeto que le había sustraído la moto” .

Lo que siguió después, es lo ya sabido por todos. Lo que pocos sospecharon, es que el ladrón, en muy poco tiempo, iba a estar otra vez en la calle.