Otra entradera en La Loma: ahora en la casa de un programador de computadoras

A la entradera cometida en la casa de un policía retirado el sábado a la noche en 17 y 39, ahora se conoció otro episodio ocurrido a nueve cuadras, que aparentemente comenzó de la misma forma. Sin que se sepa con certeza, la sospecha es que habrían estado involucrados los mismos delincuentes en las dos secuencias.

En este segundo caso, que se produjo en 34 entre 21 y 22, fueron dos en vez de tres los ladrones que redujeron a punta de pistola a las víctimas, cuando eran alrededor de las 23 de aquella noche.

Los afectados fueron un programador de computadoras de 30 años y su pareja. La circunstancia en la que los atacaron fue cuando estaban entrando a la casa, exactamente igual que en el otro hecho que sucedió ese sábado.

Los asaltantes abordaron a los dos jóvenes y los obligaron a entrar a la vivienda, siempre bajo amenazas. Al parecer nadie en la cuadra llegó a detectar la maniobra.

De acuerdo a lo informado por fuentes policiales, los asaltantes consiguieron saquear la casa, mediante una revisión de todo el domicilio que les insumió varios minutos.

El botín que se llevaron incluyó dinero en efectivo -por una cantidad que no fue informada-, electrodomésticos y otros elementos de valor.

No se informó si a la pareja la sometieron a golpes o a encierros. De por sí la secuencia tuvo la violencia típica de que las víctimas estuvieron a merced de la voluntad de dos intrusos.

Los delincuentes se escaparon con rapidez. Al menos por los datos proporcionados por voceros oficiales, “no se sabe con qué vehículo llegaron hasta ahí ni tampoco en cuál se fueron”.

Mucho menos se supo respecto de la vía de escape que eligieron para alejarse del lugar, sobre todo ante la posibilidad de que la policía llegara en breve, como finalmente ocurrió.

El episodio fue denunciado en la comisaría Cuarta al día siguiente. Se está investigando en una causa abierta en la que los oficiales se sirven de todos los medios a su alcance.

en alerta

Una hora antes y a nueve cuadras, ocurrió otra entradera violenta. Un hombre de 51 años y su madre jubilada fueron las víctimas. A él lo sorprendieron cuando entraba el auto a su casa, en una maniobra típica de esta clase de asaltos, para después amenazarlo, robarle varias pertenencias y dejarlo atado antes de escapar.

Fue en 17 entre 39 y 40. El damnificado, que según trascendió es un policía retirado, había salido un minuto a la calle cuando fue abordado por tres asaltantes. “Ni siquiera ellos saben en qué andaban o cómo llegaron”, contó un vecino respecto de lo repentino y sorpresivo que fue.

De esa casa los ladrones se robaron una escopeta 12/70 marca Remington cargada con cartuchos de postas antitumulto más una caja completa de cartuchos de escopeta con postas de plomo, una cámara de fotos, una filmadora, una cadena de oro y documentación.

Casi a la misma hora y a pocas cuadras, el jueves a la noche hubo un tiroteo entre policías y ladrones en lo que estuvo a punto de ser otra entradera en La Loma, en la calle 22 entre 43 y 44. Los cuatro delincuentes huyeron ilesos tras no poder concretar su objetivo.