¿Es posible entrenar para tener mejor rendimiento en la cama?

Aunque muchas veces se diga que el ejercicio que más favorece la vida sexual es practicar sexo sin prejuicios ni complejos, no deja de ser cierto que muchas veces un estado físico en decadencia puede atentar contra esa posibilidad. Son numerosos los beneficios de tener una actividad física regular, que no solo mejora la flexibilidad, la fuerza y la masa muscular, sino que pueden también  aumentar el rendimiento. 

Entre los hombres, el ejercicio está vinculado con el aumento de los niveles de testosterona (hormona relacionada con el apetito sexual), lo que puede estimular el interés y el comportamiento erótico, afirman Tina M. Penhollow y Michael Young, investigadores de la Universidad de Arkansas citados por el sitio especializado Sexualidad180.

Los investigadores agregan que debido a que el ejercicio regular incrementa la aptitud física de los hombres y los hace atractivos, los llena de energía y se sienten mejor con su apariencia; además, tienen más probabilidades de experimentar mayor satisfacción sexual.

El listado de ejercicios para mejorar la actitud y la resistencia cuenta con diez variantes para que ellos ya empiecen a tenerlos  en cuenta:

Elevaciones de caderas. Michael Clark, director de la Academia Nacional de Medicina del Deporte, sostiene que con este tipo de ejercicio se fortalecen los músculos de la pelvis, espalda baja, y glúteos. Esto favorece las contracciones orgásmicas.

Caminar. Una buena forma de elevar el apetito sexual es caminar 30 minutos diarios, al menos cinco días de la semana. Con esta actividad no solo aumentas la resistencia física, también se favorece la circulación sanguínea, necesaria en los hombres para mantener la erección.

LE PUEDE INTERESAR

El zika dejó de ser emergencia para la Organización Mundial de la Salud

LE PUEDE INTERESAR

Niña con cáncer logró que se la congele

Sentadillas. La entrenadora Jennifer Nicole Lee explica que al hacer de manera regular 15 repeticiones de 4 series fortaleces los glúteos y cadera. Esto favorece la resistencia y fuerza al momento de la penetración. 

Flor de loto. Con esta posición propia de los ejercicios de yoga se trabaja la pelvis y las ingles, lo cual favorece las contracciones orgásmicas. Con las piernas hay quehacer movimientos rápidos de abajo hacia arriba por 30 segundos.

Lagartijas. Son efectivas para incrementar la fuerza de todo el cuerpo, lo cual te da mayor resistencia para prolongar tus encuentros sexuales. Los entrenadores recomienda hacer tres series de 15 repeticiones.

 Abdominales. Permite que los músculos se fortalezcan. Brinda estabilidad y resistencia en la zona central del cuerpo. Esto permite poner en práctica diversas posiciones sexuales por la fuerza que se ejerce durante la penetración, señala Rich Weil, entrenador del Centro de Investigaciones sobre Obesidad en Nueva York.

Extensión de tríceps. Lee afirma que al hacerlo se fortalecen los brazos, así el hombre la condición para soportar el peso de su pareja durante las sesiones sexuales. Es necesario para ello hacer tres series de 15 repeticiones por lo menos tres veces a la semana.

Yoga. Un estudio publicado en The Journal of Sexual Medicine confirma que el yoga no solo es efectivo para tratar la eyaculación precoz, también incrementa la satisfacción sexual. Su eficacia se explica porque esta técnica estimula la respiración, el equilibrio y el control del cuerpo. Además, aumenta el flujo sanguíneo y reduce el estrés.

Peso muerto. Con esta actividad se aumenta el trabajo y la flexibilidad de la espalda, logrando mejorar la postura y estabilidad del cuerpo. Johnnie Jackson, de la Federación Internacional de Fisicoculturismo sugiere un entrenamiento regular de tres series de 12 repeticiones cada una.

Natación. Este es un entrenamiento efectivo porque proporciona elasticidad a las articulaciones, aumenta la confianza y la seguridad. Para aumentar el vigor sexual, lo ideal es nadar 30 minutos tres días a la semana.

PARA ELLAS

Existen prácticas más especializadas con las que se puede favorecer el placer y la intensidad de los orgasmos en el caso de la mujeres. Una de ellas es el yoga llamada neotantra, que, según sus defensores, enseña a utilizar el deseo como sendero hacia la realización personal. Se denomina, vulgarmente, “el yoga sexual”.

Se habla también del kung-fu sexual, una técnica en la que se aprende a ser consciente de los músculos relacionados con la sexualidad, sobre todo los del suelo pélvico y diafragma urogenital. Permiten además ganar flexibilidad y fuerza en los mismos, realizando un entrenamiento específico vaginal, combinando la respiración, aromaterapia y el trabajo con una bolita de cuarzo rosa. 

Uno de los principales beneficios que aporta es tener en forma una zona tan importante como la urogenital: vagina, útero y ovarios, así como elevar la calidad en las relaciones sexuales, “con un aumento de placer y una mayor facilidad para encontrar el punto G y alcanzar el orgasmo”.