Raptada y violada: la víctima es clave para avanzar en la causa

Para terminar de aclarar cuántos hombres actuaron en el espeluznante secuestro que sufrió hace dos semanas una mujer de 45 años en un departamento del barrio Norte, los investigadores esperan que ella pronto esté en condiciones de dar su testimonio ante el fiscal Marcelo Martini. La declaración de la víctima, K.L.C, también ayudará a determinar el rol que jugó el sujeto que la condujo hasta el departamento del fisicoculturista Néstor Monzón (50), por ahora único detenido por este caso que salió a la luz el lunes pasado.

Fuentes judiciales estiman que la testimonial de la mujer se hará la próxima semana. Así lo confirmó el fiscal Martini.

“Por el momento no tenemos datos que permitan identificar al hombre que la llevó hasta el departamento del fisicoculturista, tendré más información cuando hable con la víctima”, precisó.

A última hora del miércoles Monzón, detenido en la comisaría Decimocuarta de La Plata, tuvo que ser trasladado al hospital de Melchor Romero con un cuadro de taquicardia y excitación que voceros de tribunales adjudicaron a una “crisis de abstinencia de anabólicos y otras sustancias”.

“Lo encontraron intentando trepar las paredes y diciendo que era el Hombre Araña”, dijo un vocero. Tras ser compensado, regresó al calabozo.

El hombre está acusado de los delitos de abuso sexual con acceso carnal reiterados, doblemente agravados por resultar un grave daño en la salud física de la víctima y por ser gravemente ultrajante en concurso real con privación ilegal de la libertad agravada. Por esos cargos fue detenido el lunes en su departamento y el martes lo llevaron a los tribunales para la indagatoria, pero se negó a hablar.

Fuentes judiciales dijeron que antes de ese trámite se entrevistó con abogados de un estudio privado, pero finalmente lo representó una defensora oficial.

El hecho se registró entre el 29 de octubre y el 3 de noviembre pasados. Según la denuncia, la mujer, empleada de una maderera y madre de 5 hijos, buscaba un ingreso adicional cuando un hombre apodado “Guri” la contactó y le dijo que conocía a una persona (el fisicoculturista) que podía ofrecerle un trabajo administrativo con un sueldo de entre 10 mil y 13 mil pesos mensuales.

Para ello, le indicó que debían concurrir a la casa de Monzón para definir los horarios y tareas.

Fue así que la mujer y el “Guri” se presentaron en el PH situado en 36, entre 13 y 14, de dónde el sindicado entregador se retiró.

De acuerdo a la pesquisa, Monzón retuvo a la mujer, a quien golpeó, drogó y violó, impidiéndole toda vía de escape.

Finalmente, el 3 de noviembre último, el hombre le dijo que lo “seguía la policía” y la echó de la casa, apenas vestida, dejándola herida en las inmediaciones.

La víctima fue auxiliada en un kiosco cercano y trasladada al hospital San Martín, donde constataron las graves lesiones internas que sufrió al ser golpeada y penetrada con violencia, registrando abundantes hemorragias.

Estuvo 11 días internada. La mujer denunció lo ocurrido y la policía allanó el departamento de Monzón, donde secuestró gran cantidad de prendas de vestir con sangre, al igual que un colchón con restos hemáticos y pertenencias de ella, entre ellas unos borceguíes a los que Monzón les había colocado un cartel que decía “Trofeo de Guerra”.

El caso es muy similar al registrado en nuestra ciudad en 2013, cuando el disc jockey Jorge Cristian Martínez Poch drogó y violó a su novia, Vanesa Rial, a quien mantuvo varios días cautiva en su casa, donde permitió que al menos otro hombre la abusara.

Durante la pesquisa se estableció además que Martínez Poch había corrompido y abusado de sus dos hijas cuando eran niñas. El caso llegó a juicio oral y el 31 de agosto pasado el acusado fue condenado a 37 años de prisión.