Perpetua al acusado de matar a golpes a una jubilada en un robo

“Ahora te vas morir en la cárcel”, gritó en la sala de audiencias un familiar de la víctima. Eran casi las 14 y el Tribunal ya había dado a conocer la condena a prisión perpetua para Germán Andrés Sáenz (22), el acusado de haber matado a golpes en la cabeza a Adela Catalina López, de 82 años, en un asalto en su casa de Berisso.

Las dos hijas de la jubilada, que dieron un dramático testimonio durante el juicio, se abrazaron con la fiscal Helena de la Cruz y lloraron juntas.

Momentos antes, el Tribunal Oral en lo Criminal V de La Plata -integrado por las juezas Carmen Palacios Arias, María Isabel Martiarena, y Blanca Lazca- por unanimidad dieron a conocer la sentencia por el delito de “homicidio doblemente agravado, por alevosía y criminis causa” (para asegurar el resultado del robo).

El crimen de López ocurrió el 2 de septiembre de 2012. El Tribunal hizo lugar al pedido de la fiscal, que interpretó que el autor de ese horrendo homicidio actuó sobre seguro y se aprovechó del estado de indefensión de la víctima para concretar el feroz ataque.

Ella vivía sola en una casa de 30 y 169, la atacaron con una varilla de hierro y la golpearon en la cabeza hasta provocarle la muerte, a pesar de que la jubilada no tenía forma de defenderse. La acusación, durante el juicio realizado en los Tribunales de 8 y 57, amplió el cargo a homicidio calificado para asegurar el resultado de otro delito, es decir que el o los atacantes decidieron matarla para poder revisar toda la casa y buscar objetos de valor.

El ahora condenado, luego de los alegatos, hizo uso de la palabra. Reconoció que estuvo en el lugar ese día, que participó del robo, pero que un compinche con el que solía cometer delitos fue quien la atacó y la mató. La defensora oficial Victoria Palomino sostuvo que su cliente es inocente del crimen.

prueba contundente

En la sentencia de ayer, las juezas mencionaron como prueba contra el acusado que sus huellas fueron halladas en objetos que estaban en la escena del crimen .

Y la prueba contundente citada en el fallo es que a López la atacaron con una varilla de hierro que ella usaba para trabar la puerta, y la golpearon en la cabeza hasta provocarle la muerte. En esa varilla los investigadores hallaron ADN del ahora acusado.