“No sueño con mi vuelta sino con terminar la cancha”

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Martin Cabrera Cronica

S on las 10 de la mañana y en la cancha auxiliar está Juan Sebastián Verón dialogando con dirigentes y allegados. El sol pega fuerte y desde la avenida 1 se escuchan los gritos de los hinchas que están haciendo la cola para sacar su general para esta tarde. El presidente convocó a la prensa para mostrar los avances de la obra, pero también para hablar de su regreso al fútbol.

Uno de los encargados de la obra entrega cascos blancos. Hay que usarlos para ingresar. Verón marcha en el fondo de la fila y también se lo pone. Al comienzo del recorrido es motivo de curiosidad, pero luego nadie nota la diferencia.

El ingreso es por 55 y 1. El portón, por el que dentro de un año ingresarán los abonados a palcos y plateas preferenciales, está abierto. Uno, dos y tres pisos por escalera. El presidente se demora y quien cuenta los avances es el ingeniero Juan José Calderón. Muestra el estado de los palcos, cuenta que ya están definidas las butacas que se colocarán, habla del techo que todavía no fue presupuestado y que el césped será lo último. También pide un minuto para agradecerle al personal de la UOCRA, “que están haciendo un esfuerzo para destacar”.

Vuelve Verón y bromea con sus allegados. Sonríe y se lo ve más distendido que minutos antes. Entonces le piden que pose para las fotos con el fondo de la cancha a sus espaldas. Lo hace con el casco puesto. Y luego, por el insistente pedido de uno de los encargados de la obra, se retrasa unos metros para hablar con la prensa. Lo hace, curiosamente, en una columna que tiene el número 11 escrito con tiza blanca.

“En cada visita veo como están avanzando las obras y me genera mucha ilusión. Pero también me remueve cosas del pasado y no sólo futbolísticas: la pileta, la Colonia y todos los momentos que viví” , cuenta en su primera declaración, un poco agobiado por el calor y el acoso de la prensa que buscaba su palabra.

Luego recuerda los pocos partidos que jugó en 57 y 1 en Primera, su gol a Cruzeiro por la Supercopa y una anécdota cuando su papá la Bruja era el técnico del equipo y el estaba detrás del alambrado gritando. “Ojalá que podamos volver muy pronto aquí”.

-¿Estás conforme con el estado de las obras?

-Siempre es muy difícil la previsibilidad en las obras. Lanzarse a hacer una obra de esta envergadura con el momento que vive el país no es sencillo. El riesgo de contar con los recursos existe pero si todo sigue bien y nos acompañan el año que viene vamos a poder inaugurar este estadio.

“Será un lugar modelo para disfrutar todos los días y no sólo para jugar cada 15 días. Esto es el esfuerzo de mucha gente, que hizo y hace por el estadio. Por suerte todo marcha bien y se siguen buscando recursos porque es una obra que lleva mucho dinero”, continua el presidente y habla por primera vez en el día del problema económico que significa hacer una cancha para 25 mil personas sentadas (casi 40 mil paradas).

En esa búsqueda está el Club, pero principalmente él. Buscar los recursos es el objetivo y por eso en diciembre se irá a China y Nueva Zelanda. Ropa, naming y escuelas de fútbol. De todas esas cruzadas, como las que llevó adelante tiempo atrás en la India serán clave para que Estudiantes consiga dinero extraordinario.

El veron jugador

En el final habla de su regreso al fútbol y primero deja en claro que “jugar dependerá del entrenador, como tiene que ser”. Tras cartón dice la frase más significativa: “No sueño con mi regreso, sueño con poder terminar esta cancha”.

“El jugador de fútbol no se termina nunca de serlo. Posiblemente se lo pregunte a mi viejo y todavía hoy se sienta. Gracias a la ciencia y los avances médicos, el futbolista puede alargar su vida deportiva. Y quiero aclarar que no lo hago porque tengo ganas sino porque lo puedo hacer. Ojalá que sea un buen motivo para que la gente se acerque a colaborar”, remarca mirando para los costados.

-¿Cómo te fue en los primeros entrenamientos?

-Bien, por suerte no hay dolores. Después tendré que ganarme un lugar, hay mucha competencia y no se pueden dar ventajas. Eso lo tenemos muy claro todos y un claro ejemplo fue el Chapu (Braña) que sabía que venía a competir por un lugar y lo hace cada día.

-¿Cómo seguirá el Club ahora que volvés a jugar?

-Por suerte estamos bien. Armamos un grupo de trabajo importante que ya marcha solo y no se va a resentir cuando esté más vinculado al fútbol. Pero hoy, como ya lo dije, nuestro gran objetivo es poder terminar esta cancha.