El Muñeco, la máquina de ganar con la banda

Para muchos Marcelo Gallardo ya puede ser considerado uno de los mejores entrenadores de la historia de River. Si bien aún tiene materias pendientes (campeonato local y Mundial de Clubes), el Muñeco se sacó una espina que tenía clavada anoche al obtener la Copa Argentina, el primer torneo del plano nacional que logra levantar como entrenador del club de Núñez.

El técnico riverplatense tiene en su haber una notable cosecha de conquistas en el plano internacional, con la ansiada Libertadores de América lograda en 2015, pero tenía una cuenta pendiente en cuanto a vueltas olímpicas en certámenes organizados por la Asociación del Fútbol Argentino.

Con la Copa Argentina obtenida anoche en la Docta ante Rosario Central, el entrenador de la banda saldó la cuenta pendiente de ganar algo del plano doméstico. Si a esto le sumamos que el trofeo no había sido ganado nunca por River desde su reedición en 2011, el mérito para el técnico y los jugadores del Millo es aún más grande.

Primero fue la Sudamericana en 2014, luego la Recopa (que un año después repitió), la Libertadores y la Suruga (copa menor pero válida al fin) para desembocar anoche en la conquista de una Copa Argentina que le venía siendo esquiva a la entidad de Núñez. Con este trofeo logrado, a nivel local al Muñeco sólo le restaría dar la vuelta olímpica en el torneo regular.

Sin dudas, se trató de otro capítulo de gloria para un técnico que sigue haciendo historia.