Se extiende el combate clave por el control de la ciudad de Alepo

BEIRUT.- Las facciones islámicas y rebeldes ganaron ayer terreno a los efectivos gubernamentales en el distrito de Al Sheij Said, en el sureste de la ciudad septentrional siria de Alepo, donde recuperaron posiciones perdidas en los últimos días, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

El Observatorio indicó que continúan en ese área intensos enfrentamientos entre grupos como el Frente de la Conquista del Levante (antiguo Frente Al Nusra, una filial siria de Al Qaeda) y la milicia iraquí Movimiento Al Nuyabá, que respalda a las tropas del gobierno de Damasco.

Actualmente, las facciones dominan el 70 por ciento del barrio después de que retrocedieran frente a sus oponentes hace dos días.

NUMEROSAS VICTIMAS

Por otro lado, también en el sureste de Alepo, las fuerzas del régimen tomaron el control de la zona de Al Masaranyía y avanzaron en el barrio Bab al Nairab, en medio de enfrentamientos violentos con las facciones islámicas que causaron bajas humanas en las dos filas, añadió la ONG, que no dio más detalles.

Mientras, en el oeste de la urbe, las organizaciones armadas lanzaron cohetes contra zonas bajo el control de las autoridades, como Al Furqan, Bab al Furch, Al Meridian y Maysalún, donde al menos una persona murió y varias resultaron heridas, dijeron la agencia de noticias oficial SANA y el Observatorio.

En la última semana, las fuerzas armadas sirias y sus aliados han conquistado trece distritos del este de Alepo y han tomado parcialmente cinco, que estaban en poder de grupos rebeldes e islámicos, lo que ha originado que decenas de miles de desplazados huyan a otras partes de la localidad.

Sgún se informó el 60 por ciento de los 31.500 civiles que han abandonado sus hogares en el oriente de Alepo en los últimos días a causa de la ofensiva militar del Gobierno son niños, denunció Unicef.

“Unicef estima que 19.000 de los 31.500 civiles que han huido de Alepo oriental en los últimos días son niños”, afirmó en rueda de prensa el portavoz de Unicef, Christoph Boulierac.

Esta organización también calcula que de los 31.500 huidos, 18.000 se han refugiado en Jibreen -una área controlada por el régimen al este del área oriental sitiada-; otros 8.500 en Sheik Maqsud -una zona al norte controlada por los kurdos-; y otros 5.000 son desplazados dentro del área bajo sitio.