Francisco cumple tres años de papado, entre logros y desafíos
| 13 de Marzo de 2016 | 03:05

El papa Francisco celebra hoy su tercer año de pontificado, período durante el cual se convirtió en líder global y consiguió transformar la Iglesia para hacerla más inclusiva, más misericordiosa y más cercana a los pecadores, a los excluidos y a los descartados por un sistema económico mundial que, advirtió, “no se aguanta”.
No sin sobresaltos, el Papa buscó desde aquel 13 de marzo de 2013 desarrollar su proyecto de renovación tendiente hacia “una Iglesia pobre y para los pobres”, misionera y que no se encierra en la sacristía sino que sale al encuentro del que sufre en las periferias existenciales.
PROYECTO
El proyecto transformador de Jorge Bergoglio no pasó desapercibido en el mundo y obligó a los cristianos a cambiar y a ser más coherentes con el mensaje evangélico, para acompañar al Papa en su prédica pacifista, del cuidado del medio ambiente, de cercanía con las “víctimas” de las esclavitudes modernas de la droga, la trata de personas y el trabajo esclavo, y en la lucha contra las desigualdades sociales, el narcotráfico y la corrupción.
Sin embargo, Bergoglio recibió algunas críticas en país debido a sus seis encuentros con Cristina Fernández de Kirchner, su “frialdad” en la recepción al presidente Mauricio Macri y el gesto de enviarle un rosario a Milagro Sala, detenida en Jujuy
Las lecturas de los gestos y palabras del Pontífice y su preocupación por la “desunión” de los argentinos hicieron, que Bergoglio retrasara más de la cuenta su regreso al país, más allá de su agenda pastoral cargada.
A lo largo de estos tres años de pontificado, Francisco tendió puentes para la paz y el encuentro entre naciones históricamente enemistadas. Tal el caso de Estados Unidos y Cuba que, por la mediación papal, derribaron los muros tras más de cinco décadas de tensiones y bloqueo comercial a la isla.
La situación de los migrantes fue también una preocupación permanente del Papa desde su primer viaje a la isla italiana de Lampedusa, donde denunció la “globalización de la indiferencia” y más recurrentemente este año en que Europa no recibe o expulsa a cientos de desplazados sirios y africanos que huyen de las guerras intestinas y la persecución del terrorismo islámicos. El Papa marcó también la agenda ecológica del mundo con su encíclica “Laudato si´”
Francisco dio señales de avanzar en la siempre anhelada unión de los cristianos, luego de su reunión en Cuba con el patriarca Kirill, de la Iglesia Ortodoxa rusa.
Con todo, el pontificado de Bergoglio tiene todavía muchas cosas en el debe, entre ellas la renovación de la Curia Romana, una más eficaz política de tolerancia cero con los clérigos acusados de abusos sexuales a menores de edad, y de avanzar en una pastoral familiar más inclusiva de los divorciados.
Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE