“Me arrepiento de haber sido siempre un paraguas protector”

Con lágrimas en los ojos, la voz entrecortada y con los abrazos de los hinchas que llegaron a Abasto para despedirlo, se marchó Pedro Troglio de Estancia Chica, luego de una charla de despedida con sus jugadores en la intimidad del vestuario.

En una improvisada conferencia de prensa en la puerta del predio, el DT expresó sus sensaciones, con una mezcla de agradecimiento con el club en general, los hinchas y los jugadores y varios dardos cargados de bronca para con la comisión directiva que lo acababa de echar: “la sensación es de dolor, pero yo ya sabía esto, me lo imaginaba desde septiembre, porque desde que el Yagui Fernández se quedó afuera de las divisiones inferiores, la relación no fue la misma y era normal que en algún momento detonara la bomba. Qué mejor que el momento sea después de perder un clásico. Yo en definitiva lo sabía, aunque me voy dolido, fueron cinco años con el 52 por ciento de los puntos, con muchísimas victorias y pocas derrotas”, exclamó el DT saliente.

A lo que agregó, en el comienzo de su charla con los medios, que “fueron cuatro años y pico en los que caminamos todos juntos y hoy te sueltan la mano, pero el fútbol es así, a veces das una mano, sos un escudo protector y cuando dejás de serlo te sueltan la mano”, disparó.

“ Yo me tendría que haber ido en septiembre, cuando echaron al Yagui Fernández de toda la coordinación y de la Reserva sin consultarnos y cuando no le renovaron a Nico Navarro. No lo hice porque quería estar en este club”

Sobre su ciclo, recalcó que “hay mucho bueno y mucho malo, cualquier entrenador tiene cosas buenas y cosas malas, lo único que sé es que hemos hecho un muy buen porcentaje de puntos, el 52 por ciento desde nuestra vuelta. El fútbol tiene esto, hay que saber entenderlo, quizás me voy en el tiempo justo o tal vez me tendría que haber ido antes, pero siempre me ha tirado quedarme, porque vivo en esta ciudad, soy feliz en este club, pero también está bien que la salida haya sido de esta manera, antes de tener que tomar la decisión yo”, resaltó.

“AGRADECIDO A LA GENTE”

A modo de despedida, agregó que “soy un agradecido a la gente de Gimnasia, a toda la gente sin distinciones, me voy agradecido por lo bueno, por lo malo, por las buenas vivencias y por las malas”.

En cuanto a si lo sorprendió la decisión de la dirigencia mens sana, dijo que “sí, me sorprendió porque a la 1 de la tarde me consultaron sobre lo que había ocurrido en el palco, en cuanto a qué medida tomar o qué haría yo, y después a las 8 de la noche me dijeron que tenían que reunirse conmigo y que no daba para más. Yo no entendía qué era lo que no daba para más, si lo del palco o yo, hasta que entendí que era yo. Dejo cinco años de trabajo, con 175 partidos dirigidos, 80 victorias y 49 derrotas. Dejo muchos chicos, se han vendido muchos jugadores y siempre me arreglé con lo que el club me pudo traer. Me voy satisfecho con mi trabajo, sé que cometo equivocaciones y me voy dolido con un grupo de gente con la que caminamos juntos desde el primer día y hoy yo me quedo atrás y ellos siguen caminando”, lanzó dolido el DT tripero.

“Me correspondería cobrar hasta el 31 de diciembre de 2016, pero eso no va a pasar, voy a cobrar hasta el último día en que trabajé. Me deben diciembre, enero, febrero, la parte de marzo, aguinaldo y premios”

Sobre quiénes le comunicaron la decisión, dijo que “fueron el presidente Onofri, el tesorero Mansanta, Robustelli y Ayllón, que llegó después, pero todo duró cinco minutos” contó.

También dijo que “el grupo de jugadores nos emocionó con la despedida que nos brindó. Me quedo con muchas caras que abracé y eso quiere decir que caminamos por derecha. La demostración de los jugadores y de la gente es lo único que me importa”, recalcó.

“La vida tiene cosas injustas y el entrenador no está lejos de eso, lo importante es dejar un buen reconocimiento y eso lo tengo de la gente y de los jugadores, que siempre me fueron de frente”.

“ No sé si la decisión fue de mesa chica o de mesa grande, yo conozco cómo es el fútbol y cada uno defiende su posición. Los dirigentes la defendieron echándome, yo defiendo lo mío. Soy un eterno agradecido a la gente y a este grupo de jugadores”

“Mi carrera va a seguir, tengo 50 años y sé que seguiré viviendo de esto. Lo único que le deseo a Gimnasia es lo mejor, porque es un club fantástico, con gran gente, con una gran hinchada. Por eso, ojalá que por ellos y por los jugadores, que la cosa siga bien”, dijo, dejando un mensaje subliminal para los dirigentes, a quienes no nombró.

“Hemos hecho un buen trabajo en este club y reconozco que es injusto lo que está pasando, pero también se veía venir. Es bueno que hayan tomado esta decisión para que se termine esta historia de mentira, en una convivencia que no era la ideal”.

Sobre si se arrepiente de algo, marcó que “me arrepiento de haber sido siempre un paraguas protector. Yo podría haber tomado decisiones en las elecciones y siempre me mantuve al margen de todo. Más allá de eso, no les guardo rencor, porqué sé que caminé junto a ellos durante toda esta etapa, ascendimos y sé que se equivocaron, después, cada uno busca su conveniencia. El presidente días atrás decía que yo era lo más importante del club y después me terminó echando. Hemos caminado juntos, hemos conseguido juntos y pensé que íbamos a terminar juntos, pero no, termino primero yo”.

“ Soy un agradecido a los que me han criticado porque lo hicieron de frente, a los que no lo hicieron porque me han apoyado, a los jugadores que me sostuvieron cinco años y a mi familia que se bancó los malos momentos”

“Me gustaría que los dirigentes nos abonen lo que nos deben a todo el cuerpo técnico, porque mis compañeros se quedan sin trabajo y ellos no tienen mi tranquilidad de que puedo esperar para cobrar, ellos no pueden esperar”, reclamó el técnico tripero.

“No comparto la decisión porque ambas partes sabemos todo lo que hemos vivido juntos, en qué nos hemos protegido y en qué nos hemos aguantado. Hoy quedo afuera y podría prender el ventilador y decir un montón de cosas como ellos de mí, pero no lo voy a hacer. Vengo de una familia humilde, donde siempre se respetaron los códigos”.

“Me voy con una deuda personal con los clásicos, porque jugué 12 oficiales, gané uno, empaté cinco y perdó seis y a nivel verano gané uno, perdí uno y empaté dos. Es una deuda importante en los último años, pero me la han hecho sentir a mí solo. Les pido perdón a los hinchas de Gimnasia por no haberles dado más victorias en los clásicos”, cerró Troglio.