Accidente fatal en San Carlos; 36 muertes en lo que va del año

A casi cuatro meses del comienzo del año, ya se cuentan 36 muertes por accidentes de tránsito en La Plata y alrededores. El último accidente fatal sucedió en San Carlos, donde un motociclista murió luego de chocar contra una camioneta en el cruce de las calles 143 y 41. Los vecinos de la zona, una vez que se hubo desperdigado la noticia, atacaron la policía científica que trabajaba en el lugar del siniestro, e intentaron robarles las armas reglamentarias.

Esto sucedió sobre la noche de ayer, aproximadamente a las 21.30. Sebastián Villarreal, joven de 22 años que residía en las inmediaciones, viajaba en su moto cuando -por motivos aun no esclarecidos- protagonizó un accidente de tránsito con una camioneta Toyota -conducida por Leandro Svanossi- en la esquina de 143 y 41.

Luego del golpe, el motociclista cayó a la vereda y quedó tendido sobre el asfalto, inmóvil. Los vecinos alertaron a la policía, y minutos después llegaban a la escena móviles de la Subcomisaría La Unión, acompañados por una ambulancia para atender al herido. Los medicos allí presentes confirmaron la fatal noticia; Villarreal había muerto a causa del choque con la camioneta. 

Mientras los médicos constataban la muerte del motociclista, la noticia comenzó a viajar por el barrio y los vecinos "se tornaron agresivos con el personal presente, así también con el conductor de la camioneta" dijo un jefe policial.  Por este motivo, Svanossi debió ser trasladado a la subcomisaría, puesto que los frentistas atacaron a los policías en el lugar a pedradas.

Lamentablemente, los incidentes no terminaron allí; minutos después de que Svanossi fuera transladado a la subcomisaría -quien quedó acusado de homicidio culposo-, la policía que permaneció en el lugar estudiando el accidente fue atacada. Aparentemente, según narraron fuentes policiales, en la zona se reunieron los familiares de la víctima y, ante la demora de la policía científica y la indignación por la triste noticia que había recibido, comenzaron a atacar a los uniformados presentes en el lugar a piedrazos.

En el medio del "ataque", algunos vecinos intentaron aprovechar la situación para sacarles las armas reglamentarias a dos efectivos; finalmente ninguno perdió su arma, pero si resultaron heridos dos uniformados.