"Hay que determinar si fue un hecho delictivo o un mensaje mafioso"

El ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, dijo hoy que no descarta "ninguna hipótesis" sobre el asalto a la casa del intendente de La Plata, Julio Garro, y remarcó que hay que determinar si fue un hecho delictivo, un mensaje mafioso o si estuvo relacionado con los cambios realizados desde el gobierno provincial.

"Hay que determinar si fue un hecho delictivo o un mensaje mafioso al intendente, o a nosotros por los cambios que hicimos", expresó Ritondo. "Hay que juzgar la intencionalidad porque sabían a quién robaban. No dejo afuera ninguna hipótesis", agregó el ministro y recordó que "hace apenas dos días la gobernadora María Eugenia Vidal anunció medidas que tienen que ver con la transformación de la policía y la obligación para presentar las declaraciones juradas de subcomisarios para arriba".

En declaraciones radiales, el ministro confirmó que el policía detenido como acusado del hecho, Patricio Miguel Masana, cumplía funciones en la comisaría primera de La Plata y que en su legajo figura un antecedente por "una fuga que hubo en una comisaría platense hace un tiempo atrás". "Hay que prestar mucha atención al hecho de Julio Garro porque el epicentro se da a partir de una propiedad alquilada por un policía que trabajaba en la comisaría primera de La Plata y porque sabían a quien le estaban robando", dijo Ritondo en declaraciones a otra radio bonaerense, en las que recordó que el intendente platense "viene de hacer varias denuncias penales por robos".

Por eso, consideró que debe diferenciarse ese hecho del robo que sufrió el intendente de Saladillo, José Luis Salomón, quien fue abordado por un grupo de delincuentes en moto a tres cuadras del Ministerio de Seguridad. "Hay que diferenciarlos porque el caso del intendente de Saladillo fue mas al voleo, de motochorros", expresó.

Finalmente, Ritondo advirtió que el policía "que ensucie el uniforme va a estar afuera de la fuerza". "No seremos ni duros ni blandos, pero vamos a ser firmes con las decisiones de transformar a la policía. La mayoría de la fuerza es honesta y cuando hay casos como estos, que sientan vergüenza", concluyó.