Batalla musical: Kanye metió la pata y se peleó en las redes

El rapero Kanye West y el DJ deadmau5 son, junto a Beyoncé, Rihanna, Jay Z, Chris Martin, Calvin Harris, Madonna y otros, “copropietarios fundadores” de Tidal, el servicio que, anunciaron las superestrellas, llegaba para salvar a la industria musical.

Las grandes discográficas han perdido injerencia debido a la distribución de la música no a partir de CDs, sino a través de descargas, legales e ilegales, de internet. Y si las discográficas no brindaban grandes ganancias a los músicos, mucho menos decían recibir las estrellas del pop en un mundo dominado por servicios de streaming como Spotify y las descargas ilegales, que además, denunciaban estos mega-artistas, perjudica la calidad de la música.

Tidal era su respuesta: un servicio de streaming que compartía las ganancias entre los artistas y que imponía estándares de calidad más altos que los de la mayoría de los servicios de streaming.

Hasta allí, todo bien: sólo que uno de los más audibles defensores del servicio y del copyright de los artistas musicales, West, subió una imagen a su cuenta de Twitter donde, de fondo, puede verse que se encontraba intentando descargar de manera ilegal un software para sintetizar música llamado Serum, a través del reconocido sitio de piratería The Pirate Bay.

El programa es vendido por Xfer Records, compañía iniciada por deadma5, que alertado por los usuarios de redes sociales del furcio de West, criticó duramente al rapero: “¿Qué caraj... Kanye? ¿No podés pagar Serum? Comencemos una campaña para juntar fondos para Kanye así puede pagar Serum: necesita sólo $200 #recenporyeezy”, fue el tuit del DJ, quien arrobó en su furia al rapero.

Y lejos de hacerse cargo, Kanye le respondió con una larga lista de insultos sin ir al punto en cuestión: “¿Quién es el encargado de llevar la cabeza de ratón en el avión? ¿Tiene un ventilador portátil?”, le preguntó el rapero al músico electrónico que lleva una máscara de ratón en la cabeza, y le espetó que había contribuido al éxito de Tidal “con tres suscripciones”.

Mientras tanto, Tidal continúa sin ser un jugador primordial en la batalla por la música en el siglo XXI: a fines de 2015 celebraron alcanzar 1 millón de suscripciones, mientras que Apple Music y Spotify ya superaron los 15 millones de usuarios pagos (sin contar los que acceden al servicio gratuito). Y quizás tenga que ver que sus fundadores no parecen creer demasiado en la filosofía que utilizan para que el usuario pague 10 dólares más por su servicio premium, y que dice que los creadores merecen recibir compensación por lo que crean...