Un Arsenal de goles ante un Quilmes abatido

Quilmes Atlético Club cayó ante Arsenal por 4 a 1  en el estadio Centenario, en el marco de la décima fecha de la Zona 1 del torneo de la Primera División A.

Quilmes se había puesto en ventaja con un tanto de Brian Mansilla, pero la visita lo dio vuelta con goles de Gabriel Sanabria, Franco Bellocq, Ramiro Carrera y Miguel Caneo.

De esta manera, los del Viaducto quedaron segundos en su grupo, a sólo un punto de distancia de Godoy Cruz.

Arsenal tomó la iniciativa y estuvo a punto de abrir el marcador a los 5 minutos de juego, cuando Gabriel Sanabria dejó a Mariano Barbieri cara a cara con Silvio Dulcich, intentó colocarla por abajo y tapó el arquero.

"El Cervecero" se mantenía ordenado, presionó mejor con el correr de los minutos y tuvo una buena posibilidad a los 20, mediante un centro enviado desde la izquierda por Sebastián Romero y un remate de cabeza de Ezequiel Rescaldani que pasó por arriba del travesaño.

Si bien por momentos abusaba del pelotazo, el anfitrión era más punzante, mientras que Arsenal seguía en su paciente búsqueda de triangulaciones al ras.

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El cuadro del Viaducto sufrió otro sobresalto antes del descanso, a los 38, cuando Adrián Calello disparó a quemarropa en la puerta del área y Fernando Pellegrino desvió al córner arqueando el cuerpo en el aire.

Dos minutos después de la reanudación, Gastón Bottino encontró en las alturas a Ezequiel Rescaldani, quien de cabeza conmovió la base del caño derecho.

El gol se caída de maduro y llegó a los 8 de la etapa: Rodrigo Braña habilitó con un pase largo a Mansilla, jugador que la paró de pecho y definió de emboquillada ante el achique de Pellegrino.

Arsenal reaccionó en su peor momento, sacó del medio con otra determinación y consiguió reestablecer la paridad de inmediato, con un centro de Federico Lértora y un cabezazo de Sanabria.

Y a los 15, la visita se valió de un tiro de esquina ejecutado por el mismo Sanabria desde la derecha para tomar la delantera en el marcador, en una maniobra de mucha precisión, ya que Bellocq consiguió acomodarla de primera abajo y a la derecha para el 2-1.

Herido en su orgullo, Quilmes estuvo cerca de conseguir el empate a los 20, con un intento de media distancia de Braña que exigió otra gran intervención de Pellegrino, sobre el poste derecho.

El local se jugaba en ataque, concedió espacios en defensa y a los 27, Carrera convirtió el 3-1 de contragolpe, con un remate imponente, ascendente, que dejó sin chances al arquero.

El encuentro ya estaba definido cuando a los 35, Sanabria asistió con un centro desde la izquierda a Caneo para realizar el 4-1 a pura contundencia y convalidar la famosa "ley del ex".

En la próxima fecha, Quilmes visitará a Temperley, en un encuentro clave en su lucha por la permanencia.