Quejas por más árboles que destruyen veredas

Vecinos de distintos barrios se sumaron esta semana a una larga de lista de frentistas que reclaman que se tomen medidas con ejemplares cuyas raíces están levantando las baldosas de las veredas.

Marta Melo se quejó porque “desde hace varios años un árbol nos está destruyendo la casa. Por las raíces ha levantado las baldosas y nosotros tuvimos que hacer peripecias para que no siga afectando los distintos ambientes de la vivienda”, que está ubicada en calle 5 entre 40 y 41.

“Hicimos numerosos reclamos pero no tuvimos suerte”, dijo la frentista, quien aguarda que al lugar vaya personal de la Municipalidad para verificar la situación y tomar una decisión al respecto.

Por otra parte, Pablo Mondi, vecino de diagonal 79 entre 57 y 58, expresó que a la altura del 814 un ficus está a punto de caer y es un riesgo para peatones y automovilistas que pasan por la zona”.

El ejemplar ya está a 45 grados y en cualquier momento se cae, porque cualquier vientito “lo tambalea”, agregó el vecino.

Los factores de riesgo para la estabilidad de los árboles de la Ciudad son múltiples y no tan sencillos de detectar

En tanto que en 5 entre 54 y 55 se ve un enorme ejemplar peligrosamente inclinado hacia el lado de la calle, cuyo crecimiento ha destruido por completo la vereda. Las baldosas se ven todas partidas y por los desniveles los peatones apenas tienen espacio para transitar. A pocos metros de ese árbol hay otro ejemplar en el mismo estado, por lo que los vecinos piden que se tomen medidas urgentes. “Esta la inclinación que tienen ambos árboles”, dijo Ismael Suárez, frentista de la zona.

En el barrio el tema ha generado preocupación porque los vecinos saben que se han realizado los reclamos ante la Municipalidad pero hasta el momento “nadie ha llegado para dar una solución definitiva a este problema”, dijo un vecino.

ESPECIES, SEGUN LAS VEREDAS

Los factores de riesgo para la estabilidad de los árboles de la Ciudad son múltiples, y algunos de ellos, apuntan los especialistas, no tan sencillos de detectar. Coinciden, además, en que la interpretación de los indicios de decrepitud es crucial para prevenir accidentes, aunque advierten que ningún diagnóstico, incluyendo los de ojos entrenados, es ciento por ciento confiable. Y que eventos naturales como los temporales recientes suelen trastocar toda lógica.

Por lo general, los especialistas clasifican las especies según su aptitud para poblar veredas angostas, medianas, anchas y parques. Entre las primeras, citan a los crespones, fresnos dorados y ciruelos de jardín. Para las veredas medianas -que junto con las anchas son mayoría en nuestra ciudad-, recomiendan los fresnos americano y europeo, las catalpas, los sicomoros, los castaños de la India y las acacias de Constantinopla. Y para las más amplias, los jacarandás, tilos, lapachos, plátanos y tipas. En plazas y parques el abanico se abre, incluyendo paraísos, plátanos, álamos, tilos, tipas, jacarandás y gingkos biloba.