San Luis dio todo, pero al final se quedó sin nada

En el marco de la segunda fecha, Zona 4 del Nacional de Clubes, San Luis sigue sin conocer la victoria en el arranque del torneo y volvió a caer, esta vez por 30 a 22 frente a un amarrete equipo de Belgrano que hizo de una efectividad letal para quedarse con el encuentro y encaramarse junto a Tucumán Rugby en lo alto de la tabla.

Y sigue siendo un terreno inexpugnable la cancha del Marrón para el equipo azulgrana, es que nunca en la historia, el club de la calle 520 pudo volverse con la victoria del coqueto predio de Virrey Del Pino; aunque ayer parecía que se rompía el maleficio porque a falta de pocos minutos de juego y después de una gran remontada, el quince de Pablo Cáffaro, logró darlo vuelta.

Pero fue sólo un espejismo, porque en una ráfaga furibunda el local anotó dos tries y sentenció la historia.

PAREJO Y MUY FRICCIONADO

El comienzo del match mostró a un rapidísimo juego de backs marrón que en solo un minuto quebró el in goal platense y despertó a todos. El try de Marbán, casi enseguida a pura guapeza, niveló las cosas, pero en esa primera parte San Luis estuvo errático, atado, con dudas en la marca y cometiendo muchas infracciones. Sin facturar cuando avanzaba y sufriendo cada vez que fue atacado. Así se consumió el tiempo y el parcial lo dijo todo: 20 a 11 abajo.

APARECIO LO MEJOR

El complemento fue una demostración cabal de lo que puede dar este equipo azulgrana: dominio a voluntad de todos los lines (propios y ajenos), muchísima agresividad en el contacto y en los tackles y para sorpresa de varios, una supremacía en el scrum que hacía rato no se veía.

Y así nomás llegó el try de Facundo Bellone después de una gran jugada del pack de forwards en el lado izquierdo del ataque, que sumada a la terrible conversión de Felipe Campodónico desde un ángulo muy cerrado que sumado al penal del apertura puso a San Luis por primera vez arriba en el marcador.

Belgrano sintió el golpe y la gran cantidad de gente que acompaño al Marista también, incluso el capitán de Los Pumas y los Jaguares, Agustín Creevy, aprovechó su estadía en el país para acercarse a alentar a su querido San Luis.

Y cuando parecía que se venía un nuevo try sobre el lado izquierdo del ataque con otra gran combinación del ataque marista en combinación de backs y forwards, Belgrano zafó con un penal dudoso que cobró Federico Anselmi y salió del asedio al que era sometido.

En ese momento San Luis debería haber dado el golpe de knock out, que nunca llegó, porque casi al unísono que sonaban voces desde afuera por la decisión arbitral en una furibunda sucesión de fases, el local marcó dos tries sobre el in goal que da a la Casona tradicional y selló todo.

Una verdadera lástima para los de nuestra ciudad, que como pasó en Tucumán, se vuelven a La Cumbre sin nada. Ahora, vienen tres juegos de local, donde no habrá espacio para otra cosa que no sea ganar.