Sobres con plata: siguen la pista de la “caja negra” de la Departamental

El hallazgo de los 36 sobres con 153.700 pesos en la Jefatura Departamental La Plata dejaría al desnudo una práctica que no sería nueva ni misteriosa entre la “familia” policial; tanto, que hasta tendría un nombre que la definiría sin necesidad de preámbulos: la “postura”.

Lo que se investiga ahora es si existe una suerte de “depósito” que las comisarías de la Región debían entregar en las oficinas de 12 entre 60 y 61 el primer día de cada mes, “entre las primeras horas de la mañana y no más allá de las primeras de la tarde”, según las denuncias que les hicieron llegar a los pesquisas.

La investigación que instruye el fiscal Marcelo Martini, con la intervención de la jueza Marcela Garmendia, no tiene imputados. “Por ahora”, resaltó Martini, no sin aclarar que sí figura mencionado Darío Camerini “en su carácter de jefe del lugar donde la denuncia anónima detallaba la existencia de esta circulación de sobres”, aunque no formalmente en la causa. Esto puede cambiar de un momento a otro, en particular porque el fiscal ya anticipó también que “hay elementos para más imputaciones, pero por el momento queremos hacer todo con el máximo cuidado”.

Lo que Martini no pasó por alto es que Camerini aún no se haya presentado a declarar “espontáneamente a la fiscalía, lo que es extraño”.

Sin embargo, el ministerio de Seguridad lo mantuvo en su cargo, igual que al segundo jefe, Rodolfo Carballo, mientras que separó preventivamente de funciones al subcomisario Walter Skramowskyj; al oficial principal Ariel Huck y a la oficial principal administrativa María de los Angeles Ramírez.

Lo que los investigadores intentan dilucidar es la ruta del dinero que supuestamente debían entregar las comisarías de la Región, y si esa maniobra -en caso de que exista- abarcó a las 16 seccionales de La Plata, a las cuatro de Berisso y a las tres de Ensenada.

Los pesquisas quieren certificar si es verdad que tales sumas “se entregaban el 1 de cada mes”, como figura en la denuncia anónima que disparó esta causa, presuntamente “en cuatro sobres por dependencia”.

Desde el ministerio de Seguridad confirmaron que en los que secuestraron el viernes figuraba el nombre de la seccional y números arábigos y romanos. A juzgar por lo que comentaron distintas fuentes, se presume que esos números referían al destinatario, por rango de jerarquía dentro de la estructura, explicaron.

Sospechan, además, que un alto porcentaje de esos fondos podrían estar destinados “a los jefes” y “una parte a quien tenía a su cargo información sensible que debe remitirse a Seguridad”.

Además de aclarar qué hacían en un escritorio de la secretaría de la Departamental, Martini quiere saber el origen de los 153.700 pesos que Asuntos Internos secuestró el viernes pasado.

La presunción más fuerte es que provienen de canales “ilegales”, aseguraron fuentes de la investigación. Estos mismos voceros confirmaron que los rumores que circulan alrededor de esta causa es que cada comisaría tendría “distintas cajas”, lo que definiría, de acuerdo a esta hipótesis, los presuntos “aportes” o “posturas”, según la jerga policial.

Es en este punto que investigan si existen “tres categorías de seccionales” y si a la cabeza de este “ranking” figuran las que tienen mayor cantidad de dependencias ministeriales, entidades financieras o lugares de esparcimiento nocturno, seguidas de cerca por otras con operativos por los que se facturan adicionales y una tercera de la que dependen cientos de comercios.

De acuerdo a la hipótesis que está bajo análisis, las dependencias de las primeras categorías aportarían alrededor de 40 mil pesos mensuales, mientras que las seccionales menos acaudaladas no superarían los 7.000.

hipotesis

Si se comprueba la veracidad de las llamadas “posturas” y tomando en cuenta que el viernes (1 de abril) se secuestraron 36 sobres, podría deducirse que corresponderían a 9 comisarías, a un promedio de poco más de 17 mil pesos cada una. Si consideramos que son 23, la suma total eventualmente podría rondar los 400 mil pesos.

Los investigadores le prestan especial atención a otra supuesta “caja” que no pocos describen como “millonaria”: la de las “horas Polad de la comisaría Primera”. Esto quedó bajo la lupa de Asuntos Internos luego del escándalo que desató la detención de Patricio Masana por el asalto en la casa del intendente Julio Garro (ver página 20).

Con un sueldo de 18 mil pesos, Masana alquilaba una casona por 40 mil pesos al mes en el country Grand Bell, y aunque en los papeles figuraba como caminante de la Primera, en la práctica manejaba parte de los fondos por adicionales de esa seccional. Y no hay que pasar por alto que no era más que un suboficial.

La causa a cargo de Martini avanzó ayer con un allanamiento que realizaron los hombres de la Procuración en la Departamental, donde secuestraron un par de libros de guardia (ver aparte). Restan definir todavía la carátula del expediente -aunque los delitos podrían encuadrarse en las figuras de “incumplimiento de los deberes de funcionario público” y “exacciones ilegales” (plata obtenida de manera o por medios indebidos)- y los eventuales imputados. Lo seguro es que la investigación recién empieza.