El gobierno de Macri dijo que “respeta proceso institucional”

El gobierno de Mauricio Macri afirmó ayer que “respeta el proceso institucional” de Brasil, donde el Senado aprobó el juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff, y dijo confiar que el “desenlace” de esta situación consolidará “la solidez de la democracia” del país vecino.

“El gobierno argentino continuará dialogando con las autoridades constituidas a fin de seguir avanzando con el proceso de integración bilateral y regional”, sostuvo la Cancillería, tras la suspensión de la mandataria por 180 días.

En tanto, desde la oposición manifestaron su “repudio” al juicio político a Dilma, el cual calificaron como “una operación política”, y hablaron de “golpe de la derecha” en Brasil.

COMUNICADO

En un comunicado de prensa, el Gobierno sostuvo que “ante los sucesos registrados” en Brasil “respeta el proceso institucional que se está desarrollando y confía en que el desenlace de la situación consolide la solidez de la democracia brasileña”.

Luego, la canciller Susana Malcorra replicó las mismas palabras del escrito oficial a través de su cuenta personal de Twitter.

En conferencia de prensa en Casa Rosada, el jefe de gabinete, Marcos Peña, manifestó que Argentina va a “actuar con prudencia y acompañar este proceso institucional”, y dijo “seguir trabajando con Brasil como veníamos trabajando hasta ayer”.

No vamos a juzgar sino a seguir trabajando con Brasil como veníamos trabajando hasta ayer”, enfatizó.

En tanto, admitió que el Gobierno ve con “preocupación” el impacto “económico” a raíz de la crisis en Brasil, pero entienden que “se está dando este proceso dentro del marco constitucional”.

Por su parte, el ex gobernador bonaerense Daniel Scioli afirmó que ve con “indignación la operación política” contra la presidenta de Brasil, y consideró lo que ocurre con Rousseff es “una injusticia”.

“Observo con indignación cómo una operación política suspende a Dilma Rousseff, una presidenta electa democráticamente con mandato popular, forzando un juicio político, violentando la Constitución y atacando un proyecto político, económico y social representado por el PT nacido de un gran estadista como Lula”, expresó el ex candidato presidencial del FpV en un comunicado.

En sintonía, la diputada nacional del Frente de Izquierda Myriam Bregman repudió el “golpe de la derecha” en Brasil, y retrucó: “El gobierno de facto de Michel Temer se prepara para aplicar nuevos y más profundos ajustes” contra el país vecino.

“Hace quince días planteamos que el Congreso debería repudiar el golpe de la derecha que se estaba desarrollando en Brasil. Ya se perpetró y es necesario más que nunca que el Congreso lo repudie sin dilaciones”, señaló en un comunicado.

El juicio político contra la suspendida mandataria fue aprobado tras 18 horas de sesión ininterrumpidas, en la que 55 senadores votaron a favor del impeachment (juicio político) y 22 en contra.

Días antes de asumir al frente del Ejecutivo, Macri viajó a Brasil para reunirse con Rousseff y allí hablaron sobre el proceso judicial que enfrentaba la mandataria, pero se negó a tomar posición y manifestó su “confianza en las instituciones de ese país”.

A mediados de abril, el jefe de Gabinete, Marcos Peña, confirmó que el Presidente se comunicó con su colega para hablar sobre “la crisis” política que atraviesa Brasil, la que, afirmó el funcionario en esa oportunidad, “preocupa mucho al Gobierno