Piden el procesamiento de De Vido
| 18 de Mayo de 2016 | 15:13

El ex ministro kirchnerista de Planificación Federal y actual diputado nacional Julio De Vido declaró hoy como imputado en dos juzgados federales de Comodoro Py y sólo una hora después de que se marchara la fiscalía pidió su procesamiento por la compra de trenes inservibles a España y Portugal.
Para el fiscal Federico Delgado, el procesamiento se justifica porque "De Vido fue un responsable más" de las compras de vagones y locomotoras usadas por 102 millones de euros ya que "pasaron por sus manos todas las decisiones autoritativas relativas al transporte ferroviario" y lo acusó de los supuestos delitos de “peculado” y “cohecho” como partícipe necesario.
El requerimiento de Delgado llegó al juzgado federal de Julián Ercolini apenas una hora después de que De Vido compareciera en declaración indagatoria y en su escrito de descargo responsabilizara por el asunto a la Secretaría de Transporte y a la CNRT, que estaban bajo la órbita del ahora procesado y detenido ex secretario Ricardo Jaime.
"La verificación de compatibilidad o funcionalidad del material ferroviario solo podía ser realizado por los organismos normativamente designados y dotados de personal competente para ello: la Secretaría de Transporte y la CNRT", disparó el ex ministro y aseguró que su función "no era la de ejecutar, gestionar o controlar las políticas particulares asignadas formalmente a otros organismos".
En cambio, Delgado dictaminó que “no hubo compartimientos estancos” entre Ministerio, Secretaría y CNRT sino que entre todos “montaron un dispositivo que les permitía pagar sumas de dinero altísimas por material que no lo valía y generar ‘retornos’” y por consiguiente “hubo complicidad criminal”.
El plan de reorganización ferroviario fue el pacto original que funcionó como una pantalla para justificar el saqueo de las arcas públicas, seguido de una explicación singular: nadie es responsable del todo”, sostuvo el agente acusador.
“Decidieron comprar chatarra como si fuera buena y facturar sumas exorbitantes a empresas amigas en conceptos de ‘asesoramiento técnico’ que, en realidad, ocultaban sobornos”, remató.
Desde abril último, Jaime y su ex mano derecha, Manuel Vázquez Garea, están procesados con prisión preventiva –el primero en la cárcel de Ezeiza y el segundo en su domicilio-, junto al ex secretario de Transporte Juan Pablo Schiavi por la compra de trenes inservibles, que terminaron abandonados en playones ferroviarios.
De Vido se negó a responder preguntas y presentó escritos de descargo tanto ante Ercolini como frente al juez federal Sebastián Ramos, que investiga por qué nunca se renegociaron los contratos ferroviarios de transporte de pasajeros entre 2003 y 2009.
El ex ministro admitió que no revisó las concesiones de los trenes a empresas privadas y lo atribuyó a que “los contratos estaban ipso facto renegociados (…) entre los años 2000 y 2001 y porque el decreto del año 2002 modificó la ecuación económica de los mismos”.
“No existían urgencias o condicionantes que determinaran la necesidad de una nueva renegociación, ya que las herramientas a la mano del Estado eran suficientes para que el servicio público se prestara”, consideró y resaltó que “el Estado decidió llevar adelante una política de subsidios para garantizar la prestación del servicio”.
Por último, De Vido aseveró: “Niego, concretamente, haberme interesado en beneficio de las concesionarias y, de hecho no existe ni una sola evidencia que permita sostener que hice o dejé de hacer algo como Ministro en beneficio de algún concesionario o contratista del Estado”.
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