Fuertes contrapuntos políticos por la tarifa de los taxis en La Plata

El aumento en la tarifa de los taxis volvió a mostrar ayer una fuerte pulseada en el seno del oficialismo, luego de que el presidente de la comisión de Hacienda del Concejo Deliberante, Julio Irurueta, decidiera excusarse de tratar en ese ámbito el dictamen firmado por los concejales en la comisión de Transporte para otorgar el 20% de suba en la bajada de bandera y el 33% en la ficha.

Como lo hizo el martes, cuando se reunió su comisión, Irurueta sostuvo que considera “excesivos” los porcentajes acordados en ese dictamen y suspendió de imprevisto el encuentro previsto para ayer al que había convocado al representante del sindicato de choferes de taxis, Juan Carlos Berón. Pero, además, anticipó que no votará el aumento en el recinto.

Se trata de un proyecto de ordenanza debatido el lunes pasado en la comisión de Transporte, que preside el edil del Frente Renovador Miguel Forte, y que, además de los vocales de distintas fuerzas, contó con la presencia de representantes de asociaciones de propietarios de taxis y radios, el director de Habilitaciones del municipio, Pablo Guidi, y el presidente del Concejo Deliberante, Fernando Ponce.

En ese cónclave, tanto los representantes de Cambiemos como del Frente Renovador, el Frente para la Victoria (FpV), y los monobloques acordaron llevar el valor de la bajada de bandera de $15 a $18 y pasar el costo de la ficha de $1,50 a $2.

Si bien un informe del Ejecutivo, consultado al respecto, establecía como recomendación otorgar un incremento inferior y en dos tramos -una parte ahora y otra en noviembre-, en la comisión de Transporte hubo pleno consenso para la definición de esos montos, que contó, principalmente, con el aval de Ponce y la firma del presidente del bloque de Cambiemos, Juan José Cardozo, y sus compañeros de bancada Claudio Frangul y Guillermo Ronga,

Pero Irurueta marcó la diferencia con el resto del bloque oficialista y consideró que el monto definido para el valor de la ficha era “excesivo” y que en la reunión anterior “no habían sido escuchados todos los sectores”.

Por eso, luego de suspender el encuentro que había convocado para hoy en el ámbito de la comisión de Hacienda, decidió “excusarse” de su tratamiento y anticipar su rechazo en el recinto.

POLEMICA

La posición del edil del PRO provocó un fuerte ruido, evidenciando los contrapuntos dentro del bloque del oficialismo. El martes, Ponce había afirmado a este diario que “el despacho firmado cuenta con el consenso de los bloques y del propio intendente Garro” y que “por reglamento la comisión de Hacienda no puede modificar lo convenido en Transporte y Tránsito”.

Si bien el Ejecutivo decidió ayer no expedirse sobre el tema “que deben decidir los concejales”, el martes había trascendido la conformidad de la jefa de Gabinete, Natalia Vallejos, de “escuchar a todas las voces” antes de aprobar “un aumento tan importante”.

En medio de la polémica, ayer Berón acudió a la invitación en el Concejo quejándose de no haber sido convocado al primer encuentro. Tras conocer la suspensión de la reunión reiteró que el aumento en la tarifa es “demasiado” y expresó su preocupación por la caída en la demanda del servicio y su impacto sobre el trabajo de los choferes que ganan a porcentaje.