Taxistas piden aumento del 33% para las fichas

Con el sistema Uber, por ahora, en “stand by”, un sector de los choferes de taxis busca un ajuste tarifario y reiteró su pedido en el Concejo Deliberante para que el cuerpo legislativo local resuelva el aumento. Piden que la bajada de bandera se cobre $18 y la ficha $2, lo que llevaría a un aumento de tarifa promedio de un 30 por ciento aproximadamente.

Por la bajada de bandera se cobra ahora $15 y por la ficha que cae cada 120 metros $1,50.

En rigor, la demanda de un nuevo incremento tarifario había sido formulada en el Concejo un mes y medio atrás por parte del Sindicato Unión de Conductores de Taxis, pero a raíz de la movida que originó el posible desembarco de Uber en la Región, el planteo quedó en un segundo plano dentro de las preocupaciones del sector.

Ahora, el gremio que conduce Juan Carlos Berón volvió a la carga con el reclamo. “El sector taxi ya no da más”, remarcó el sindicalista en la nota que presentó en el Palacio Municipal, al tiempo que detalló que “desde diciembre a la fecha el combustible aumentó más de un 30 por ciento, los repuestos más de un 50 por ciento y los alimentos más de un 50 por ciento”. Y remató: “mantener un taxi en la calle ya es una hazaña para los propietarios”.

Así, con la readecuación tarifaria que está reclamando Berón, un viaje en taxi promedio, estimado en un recorrido de 25 cuadras (por caso, de 8 y 50 a parque San Martín) por el que se pagan alrededor de $51, costará $66.

LOS PROPIETARIOS PIDEN MÁS

También los dueños de las unidades, en este caso los nucleados en la Unión de Propietarios de Auto Taxis - UPAT - insisten con el pedido de aumento en la tarifa. La entidad, que quiere un poco más de incremento que los choferes, había presentado su solicitud al Concejo el 15 de marzo pasado para que se autorice una bajada de bandera a $20 y la ficha a $2. “Aunque ahora, con los últimos aumentos del costo de vida, igual vamos a quedar defasados, por lo menos necesitamos que se ajuste la tarifa en esos valores”, resaltó el secretario de Prensa de la institución, Alberto Rivarola.

Junto al pedido de aprobación del aumento, la UPAT había desgranado, costo por costo, los incrementos que había afrontado el sector en el período febrero 2015 - febrero 2016. Según esos cálculos, una cubierta había pasado de costar $790 a $1.490; el cambio de aceite de $720 a $1.300; las cargas sociales (por mes, por trabajador) de $1.120 a $1.970; la nafta súper (sin contar este último aumento que llevó el combustible a más de $17; y un auto 0 km (el ejemplo es el Siena), de $160.000 a $245.000.

“Todos esos valores eran en marzo, cuando presentamos el pedido. Ahora, con este último aumento del combustible, ya nos estamos quedando retrasados otra vez, pero por lo menos que autoricen esos valores”, añadió Rivarola.

El dirigente se quejó porque “aunque hicimos la presentación hace un mes y medio todavía no resolvieron nada y para nosotros el tratamiento del tema es súper urgente. No podemos bancar más estas tarifas”, concluyó.