El plantel de Gimnasia podría sufrir una serie de diez bajas

“ Hay que ver cuáles son las bajas del equipo”, resumió Gustavo Alfaro para ordenar el cuadro de situación planteado en Gimnasia una vez finalizado el campeonato que ayer quedó en manos de Lanús, y de cara a lo que será un receso muy activo para la dirigencia que deberá rearmar un plantel que, con diferentes matices, tendrá varias salidas.

Alfaro, que en breve se convertirá en comentarista de la Copa América de selecciones para la Cadena Caracol, de Colombia, tiene en claro lo que pretende para el torneo que viene, pero como el mismo lo manifestó, habrá que ver lo que le queda del plantel que dirigió en el tramo final de la temporada que finalizó ayer en el estadio de River.

El DT quiere incorporar un arquero con características definidas, que no las tiene Enrique Bologna, quien en las dos últimas presentaciones del equipo perdió el puesto, que ocupó el juvenil Alexis Martín Arias, pero ¿se irá Bologna? Por lo que se dejó trascender, al Beto la dirigencia le ofrecerá la rescisión del contrato, pero falta saber cuál será la respuesta.

También recomendó la contratación de un marcador central, pues Mauricio Romero no aparece en sus planes, y el material con el que cuenta, bajo su conducción no brindó ningún tipo de garantías. Empezando por Oliver Benítez, desplazado ante Colón en la última fecha para permitir la presencia de Manuel Guanini.

Otra posición que Alfaro necesita cubrir es la que seguramente dejará libre Fabián Rinaudo, cuyo pase es compartido por Sporting de Lisboa, Portugal, y Catania, de Italia. El tema es que la ficha del mediocampista central está en el orden de los 2.000.000 de dólares, y por lo menos hay un par de clubes que están alertas para sumarlo.

Para completar la columna vertebral del nuevo modelo de Gimnasia que Gustavo Alfaro pretende desarrollar en Estancia Chica desde que los jugadores retomen la actividad, falta confirmar el futuro de Walter Bou, el goleador a quien el entrenador quiere mantener, pero cuya relación con el club de la calle 4 finalizará el 30 de junio y para considerar una renovación, los negociadores albiazules tendrán que competir con varios. Entre ellos Boca Juniors, que a pedido de Guillermo Barros Schelotto lo quiere recuperar tras haberlo dejado libre.

Matías García no está en los planes del DT, y de los que no fueron titulares en el torneo que finalizó ayer con Lanús campeón, es el caso más resonante de todos

Los referidos cuatro es altamente probable que no estén en el Lobo que se viene, por decisión de Alfaro en los dos primeros casos, y por cuestiones ajenas, en los dos restantes. Pero hay más, porque las bajas que parecen venirse incluyen a otros jugadores que llegaron a tener protagonismo bajo la conducción de Pedro Troglio, y que no se encuentran en el nuevo proyecto futbolístico al que se quiere dar vuelo con un significativo recambio.

En este marco, no encuadran jugadores como el lateral Matías García, el arquero Yair Bonnin, el volante Ezequiel D’Angelo, el delantero Antonio Medina y el experimentado volante Omar Pouso. Con ellos, hay poco menos que un acuerdo para interrumpir sus contratos, con detalles económicos que no trascendieron, y un par incluso tienen adelantadas las negociaciones para incorporarse a otros equipos.

Sorprendió más el corte dispuesto con García, un zurdo con recorrido por toda la banda izquierda que perdió vigencia a raíz de una serie de lesiones que le demandaron un largo proceso de recuperación. El resto fue poco menos que una consecuencia lógica, porque Bonnin quedó muy atrás luego de su frustrada aparición en Primera, D’Angelo resultó una denominada “apuesta” de la dirigencia que no llegó a instalarse, el Tony tampoco consiguió afirmarse como pieza de ataque y el uruguayo apareció muy poquito, casi nada.

Todos estos casos han quedado en manos de la dirigencia, que según lo acordado con Gustavo Alfaro, antes de su viaje a los Estados Unidos, deberán avanzar sobre objetivos prefijados, aunque a partir de las bajas que se registren. Por decisión propia del club, o por la aparición de “terceros”, como los casos de Rinaudo, Bou y por lo que se conoció en las últimas horas Lucas Licht, quien sería tentado por la Universidad Católica de Chile.