Protesta, saqueos y un muerto en Venezuela

Nuevos focos de protestas e intentos de saqueos se desarrollaron ayer en varios estados de Venezuela, que sufre una severa crisis de escasez y desabastecimiento en materia de alimentos y medicinas, jornada que dejó al menos un muerto y el incendio de una sede del oficialista Partido Socialista (PSUV).

En Cumaná, capital del estado Sucre, en el este del país, algunas informaciones dieron cuenta de dos muertos, aunque solamente se confirmó una víctima fatal, y al menos 30 heridos, tras un enfrentamiento entre los cuerpos de seguridad del Estado y los manifestantes.

Desde la mañana, los habitantes de la zona al parecer salieron a esperar camiones con alimentos que abastecen los comercios de la región y, en medio de esa espera, se desarrollaron conatos de saqueo.

El alcalde de Cumaná, David Velásquez, calificó lo sucedido como "actos de vandalismo y robo de locales comerciales" que cuentan con la participación de "grupos delictivos", según escribió en su cuenta en la red social Twitter.

El mandatario local decretó la suspensión por 72 horas de la circulación de motocicletas en la ciudad y pidió a la población mantener la calma.

"Se hace un llamado a la calma y a la Paz a la población en nuestras comunidades y a no hacerse eco de rumores y acciones vandálicas", expresó. En el medio privado Vivoplay.net se informó que al menos dos locales habían sido saqueados.

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El coordinador general de la ONG Programa Venezolano de Educación-Acción en Derechos Humanos (PROVEA), Marino Alvarado, dijo en su cuenta de Twitter: "Nos informan que se vive una tensa Calma en #Cumaná. Los reportes de comercios saqueados son numerosos. Ciudad tomada por GNB (policía militarizada).

Y desde la cuenta de Twitter de PROVEA fue publicado hoy el escrito: "Creciente represión y abusos militares han causado la muerte de 3 venezolanos en protestas por comida realizadas en días recientes".

El diputado opositor Armando Armas, en tanto, mostró fotos de cómo se encontraban algunas avenidas y calles de Cumaná, en donde denunció que los manifestantes fueron reprimidos por los cuerpos de seguridad del Estado.

"Cada vez son mayores los reportes de saqueos y protestas en todo el país, mientras una cúpula corrupta se niega a aceptar ayuda humanitaria!", señaló Armas en un mensaje en su cuenta de Twitter.

El parlamentario Juan Guaidó indicó, por su parte: "Nos informan que también hay intentos de saqueos en Maracay. Esta es la realidad de Venezuela! Que el mundo lo sepa!".

Otros informes daban cuenta de que los habitantes de la ciudad de Guarenas, en el céntrico estado Miranda, y de la zona caraqueña de Catia también estaban protestando por falta de comida.

La agencia DPA citó a la diputada Milagros Paz para hablar de dos muertos y 25 heridos en Cumaná, durante saqueos a unos 60 negocios.

En las últimas semanas las protestas por falta de comida han dejado tres muertos en distintas ciudades del país: uno en Caracas, otro en la región de Táchira y otro en la localidad de Cariaco, en Sucre, donde un hombre de 21 años murió de un balazo en la pierna. 

En Lagunillas, Mérida, la promesa incumplida de vender leche desató la molestia de grupos de habitantes, y algunos encapuchados desprendidos de manifestaciones provocaron el incendio de una sede del gobernante PSUV.

En Ginebra, Suiza, en tanto, tres diputados de la opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) advirtieron que Venezuela estaba “al borde de un estallido social a causa de la situación de crisis humanitaria”.

"La crisis es tal, que el país está a punto de un estallido social. No llega la comida a la gente y ya hemos visto últimamente brotes de violencia", dijo Rafael Guzmán, diputado de la Mesa por el partido Primero Justicia, opinión que compartieron Sergio Vergara (Voluntad Popular) y William Barrientos (Nuevo Tiempo), que estuvieron en un evento organizado por la Unión Europea y la Unión Interparlamentaria para dinamizar el trabajo de la Organización Mundial del Comercio (OMC).

"Todos los días hay saqueos, hay protestas por falta de alimentos, por carencia de los servicios básicos, hay problemas de seguridad; el transporte se paraliza porque no hay repuestos para los vehículos. El colapso es total en todas las áreas de la economía y de la vida de los venezolanos. La calidad de vida se perdió por completo", indicó Vergara.

Los tres congresistas lamentaron que el Tribunal Superior de Justicia anulara la ley aprobada por el Parlamento en nombre de la crisis humanitaria para establecer un sistema de distribución de medicamentos de emergencia para aquellos que lo necesitan.