Nicolás Cabré, en cine y en teatro

El actor Nicolás Cabré aseguró que está “feliz” con su momento actoral en la exitosa obra de teatro “El quilombero”, y sostuvo que ya no puede embarcarse en más de un proyecto a la vez, en la semana del estreno de “Alma”, una comedia chilena en la que tiene “una participación especial” que llegó a los cines porteños el jueves.

“Ya no puedo hacer teatro, televisión y cine al mismo tiempo. Trato de hacer las cosas de a una, porque te quita mucho tiempo y te provoca mucho desgaste”, dijo el actor, mucho más amigable con los medios en esta nueva etapa de su carrera alejada de los escándalos, aunque igual de reacio a hablar de su vida privada.

Cabré comenzó en la actuación a los 10 años y pasó por una gran cantidad de tiras televisivas, largometrajes y obras teatrales. “Así como estoy, estoy muy bien. Tengo tiempo para hacer lo que quiero y soy feliz así”, agregó el actor de la novela ‘Son Amores’, quien protagoniza en el teatro Lola Membrives “El quilombero”, un texto del guionista francés Francis Veber, con dirección de Arturo Puig.

“Estamos felices con la obra. Es una comedia que nos da muchas alegrías, la pasamos bien y estamos súper contentos con la respuesta de la gente. Es una comedia pura, para ir al teatro a reírte un rato”, afirmó Cabré, de 36 años, en cuya carrera existe una amplia mayoría de representaciones cómicas.

En “Alma”, del director argentino radicado en Chile Diego Rougier, el actor de “Sin Código” representa a Gaspar, un argentino galán y entrador que, en una visita a Santiago de Chile, se enamora de Alma (Javiera Contador) y a quien lleva a Buenos Aires a conocer a su madre. A su vez, Alma, una joven que sufre una peculiar bipolaridad que mezcla desvarío, olvidos y arrebatos artísticos, se encuentra en un confuso proceso de separación de su marido Fernando (Fernando Larraín), quien hace hasta lo imposible por recuperarla.

HUMOR CHILENO

El filme cuenta con el elenco de la versión chilena de “Casados con hijos” y presenta una gran cantidad de chistes con la impronta de ese país trasandino, por lo que el humor se encuentra fuera de los cánones a los que el público local está acostumbrado en lo que es una comedia casi absurda. “Lo mío es una participación especial en una película chilena, donde la historia y los protagonistas son todos chilenos. Si ves el afiche parece otra cosa, para mí no está bien”, aclaró el protagonista de “Por amor a vos”, a la vez que sostuvo que durante el rodaje lo trataron “súper bien, en un momento muy difícil” de su vida.

A pesar de las abundantes tiras cómicas en las que participó durante su carrera, Cabré sonrió al ser consultado si se consideraba parte del “club de comediantes argentinos” y negó rotundamente llegar a ser parte de ese espacio, al afirmar que él es “un actor” que trata de hacer su profesión “lo mejor posible”.

Ya no puedo hacer teatro, televisión y cine al mismo tiempo. Trato de hacer las cosas de a una, porque te quita mucho tiempo y te provoca mucho desgaste”

“Cuando hago comedia lo tengo que hacer bien, y cuando tengo que hacer un drama, lo mismo”, sostuvo, y sobre la posibilidad de realizar otros papeles en un futuro, contestó: “No soy una persona que piense mucho en lo que vendrá. Los proyectos que vengan los evaluaré en su momento”.

OTRAS FACETAS

Este año es el primero desde 2007 que Cabré está fuera de la televisión, donde tuvo su último papel en el ciclo “Variaciones Walsh”, basado en textos literarios del periodista asesinado por la última dictadura militar Rodolfo Walsh, emitido por la Televisión Pública, lo que fue una novedad dentro de su trayectoria.

En esa miniserie representó a Daniel Hernández, considerado alter ego de Walsh, quien es corrector en una imprenta y tiene como proyecto publicar un libro sobre casos policiales. “Estuvo bueno hacer ese trabajo. Si bien yo sabía quién era Walsh, no había estado tan encima de su literatura o en contacto con gente que lo conoció o con su hija. Tener la responsabilidad de homenajear a una persona así son las cosas que te hacen crecer”, comentó sobre aquella experiencia.

En ese sentido, también destacó la posibilidad dentro de su trabajo para poder nutrirse de diferentes colegas porque “todo el tiempo se esta aprendiendo, con gente diferente, que tiene una mirada distinta a la de uno, tanto en lo profesional como en lo personal”.

Sin embargo, en contraposición a otras artes, como por ejemplo músicos que se inspiran en un libro, en la actuación, para Cabré, “es distinto”. “Un músico puede buscar inspiración en otro arte, pero yo no puedo encontrar a un personaje leyendo algo que no sea de la obra. Son diferentes profesiones y se encaran de forma diferente”, sostuvo el actor.

“Fui variando mucho desde que empecé. Gracias a Dios no soy el mismo que hace 10 años, no porque me arrepienta de algo, sino porque hay cosas para modificar sí o sí”, resumió Cabré.