Los apagones no dan tregua y ya jaquean a barrios céntricos

Durante los últimos 4 días, vecinos que viven en cuadras comprendidas entre la Catedral y Plaza Malvinas sufrieron cortes de luz prolongados, al punto que debieron convivir con velas y luces de emergencia siempre a mano, además de verse obligados a cambiar sus rutinas. También sufrieron perjuicios los comerciantes, cuyas actividades dependen del servicio eléctrico como peluquerías, tintorerías y almacenes.

En 18 y 58, un grupo de operarios de Edelap trabajó ayer durante buena parte de la mañana con la “supervisión” de varios vecinos que dijeron estar cansados de los cortes que se sucedieron durante toda la semana.

“El problema son los tres edificios que están haciendo en la manzana, la zona se superpobló, pero no se mejoraron los servicios, entonces cada dos por tres se nos corta la luz o nos quedamos sin agua”, contó Carlos un vecino que vive en 19 y 58, otro de los damnificados por el corte.

Carlos señaló que hace 25 años que la cámara de Edelap ubicada en 18 y 58 brinda el servicio eléctrico en ese sector. “Desde esa plataforma se abastece el área que va de calle 55 a 58, los fusibles son de 400 amperes, pero no resisten el crecimiento de la demanda”, agregó el hombre.

Comercios cerrados

A pocos metros de esa esquina con un inmenso cartel, una peluquera le advirtió a sus clientes que no atendería por falta de luz. También tuvo que tomarse una pausa involuntaria el personal de una tintorería ubicada en calle 18, según contaron los vecinos, las máquinas lavadoras quedaron llenas de agua cuando se cortó la luz.

Los problemas con la electricidad se hicieron más severos desde el martes pasado. Por caso el miércoles los vecinos se quedaron sin luz entre las 6 y las 22, luego volvió la electricidad por algunos minutos y se cortó nuevamente dejándolos sin energía durante todo el día.

“Hace un mes que rompieron las veredas para hacer una obra, incluso taparon los accesos a algunas cocheras de la cuadra y lo que es peor es que no se resolvió nada”, agregó otra persona que vive en ese sector.

Las personas enfermas fueron las más perjudicadas como fue el caso de un insulino dependientes que optó por trasladar los medicamentos a otra casa para que no cortara la cadena de frío. También se conoció la penuria que tuvo que pasar una mujer para seguir atendiendo a su esposo discapacitado, al que le tuvo que variar la dieta por no poder procesar los alimentos.

“Hace dos días que mi esposo no se puede bañar porque sin la estufa eléctrica en el baño, tengo temor de que sufra un enfriamiento y se enferme más”, contó la mujer domiciliada sobre calle 18 y 57.

En la zona también se quejaron porque durante las maniobras realizadas por los operarios de Edelap se habrían roto caños de agua y de gas.

“En los últimos 4 días sufrimos cortes de luz, algunos más largos que otros, cuando me acerqué para ver el transformador de 18 y 58 había cables de hierro totalmente fundidos, no resistieron y eso que los habían cambiado hacía poco”, señaló Ricardo Gudibay, otro de los vecinos que ayer estuvo sin energía eléctrica. Al igual que otras personas que viven en ese sector, el vecino asoció los problemas con el servicio eléctrico a la construcción de edificios que se hicieron en los últimos meses.

“Donde antes había una casa de familia, hoy levantan un edificio con 30 departamentos, si no se mejoran los servicios es normal que ocurran estas cosas”, agregó el hombre.

En la casa de la familia Allio también se enumeraron los padeceres por la falta de luz.

“El lunes nos cortaron la luz, el martes también; el miércoles desde las 2 de la madrugada hasta las 17 estuvimos sin servicio y después se cortó hasta hoy”, indicó Claudio Allio.

Allí como en otros hogares tuvieron que prescindir de todos los artefactos cuyo funcionamiento depende de la energía eléctrica. Por eso postergaron el uso del lavarropas, el encendido del televisor y además abrieron la menor cantidad de veces posible la heladera para impedir que se descongelara.

Mas barrios

Otro barrio donde los cortes de energía eléctrica son cosa de todos los días y tienen hartos a los vecinos es en inmediaciones de los Tribunales platenses, en torno a las calles 14 entre 47 y 48 (ver aparte).

En Berisso no la pasa mucho mejor Adrián Copiarollo, un vecino de la cuadra de calle 127 entre 66 y 67, de Villa Argüello, que está acostumbrado a pasar las noches a oscuras. Y también las tardes: “Estoy sin luz desde anoche (por el miércoles) a las 23”, comentó, resignado, ayer a las 15.30.

Contó que las fallas en el servicio se repiten a diario, sobretodo los días más fríos, y afectan tanto a su cuadra como a la de 128 entre 66 y 67. “Vengo pidiendo que me cambien de fase, porque hay otros vecinos de la zona a los que no se les corta tan seguido, pero nunca me cambian”, se quejó el hombre, a quien las falencias del servicio le causan innumerables trastornos.

Copiarollo explicó que hizo los reclamos tanto a Edelap (N°2396402) como a OCEBA (N°18520), pero sin que le den una solución.

También reclamaron en el barrio Villa Paula, de Berisso. “No sabemos a quien quejarnos porque en Edelap nos atiende un contestador automático”, aseguraron frentistas, quienes explicaron que ayer a las 17.30 la luz se cortó en el radio que va de calle 150 hasta 142 y desde allí por 8 hasta la plaza Almafuerte.