Con la mudanza de la zona roja en veremos, sigue el descontrol

No hay proyecto de solución a la ”zona roja” platense que se concrete. Después de las repetidas quejas de los vecinos y comerciantes de plaza Matheu, por las molestias que genera la actividad, tampoco prosperó la última y enésima iniciativa para mudar el comercio sexual a un circuito del Paseo del Bosque especialmente pensado para no causar malestar en sectores poblados con hogares y negocios. Las denuncias de la gente del barrio, en tanto, se mantienen a la orden del día y apuntan más a la venta de drogas que a la oferta de sexo de trans y travestis.

La zona donde más se ejerce la prostitución son la avenida 1, las calles 2, 3, 4, 64 y 65 y diagonal 73, aunque, en rigor, la actividad suele extenderse también entre las plazas España y Matheu. No hay vecino ni comerciante que no se queje. El primer grupo porque vive, en primera persona, el desorden (de tránsito, a veces con gritos e insultos) que ocasiona la prostitución en la vía pública; y el segundo sector, porque a la mañana temprano, cuando llega al local para levantar las persianas y ponerse a trabajar ve el “desastre” que dejó la movida nocturna en la vereda, con suciedad de todo tipo. Además, en el barrio aseguran que allí es “muy fácil” ser testigo de la comercialización de estupefacientes.

“Es una actividad ilícita que debería ser controlada. En esta zona el comercio nocturno de drogase detecta así nomás, cualquiera ve cómo las personas trans entregan la bolsita a los clientes. Ahora, por las reuniones que tuvimos con Seguridad del Municipio desde hace dos semanas hay más móviles de la Policía Local , pero hace falta una solución más definitiva”, planteó un joven que vive en 1 entre 64 y 65 y que, sostuvo, “este no es un problema de lugar; no se puede trasladar el problema a otra parte; hay que terminar con el tráfico de drogas”.

Del lado de los comerciantes, se afirmó que “la zona roja sigue acá de lo más instalada” y según añadieron en un local de 2 y diagonal 73, “al otro día de una noche de fin de semana este lugar es un desastre, y cuando cerramos el negocio, a las nueve de la noche, ya están rondando las travestis que empiezan a trabajar”.

En febrero último se dio a conocer un proyecto impulsado por el presidente del Concejo Deliberante, Fernando Ponce, en el que se proponía trasladar la “zona roja” al área abarcada por la avenida Iraola, desde 119 hasta el cruce con la avenida Centenario, todas calles internas del circuito del Bosque. Desde entonces, el edil viene reuniéndose con las representantes de las trabajadoras sexuales para acordar con esos colectivos detalles de la iniciativa que, dice ahora el concejal, “debe salir del consenso de todos los bloques partidarios, porque es una medida muy compleja, una política de Estado que no puede definirla un solo espacio político”.

¿CAMBIOS EN EL LUGAR DE MUDANZA?

De esas reuniones surgió, además, un posible cambio del nuevo sector donde se instale la prostitución una vez erradicada del barrio de plaza Matheu: No sería, finalmente, el de la avenida Iraola sino el de la avenida 52, el área que da a los frentes del Club Hípico y el Cuartel Central de Bomberos de La Plata y la parte trasera del predio del Jardín Zoológico.

“El proyecto hay que pensarlo muy bien. Ellas sugieren colocar en el lugar carpas sanitarias donde harían campañas preventivas de enfermedades - resaltó Ponce - y quieren que salga, por ordenanza, una serie de derechos del sector que estamos estudiando”.

Sobre la enorme cantidad de denuncias que hablan de una continua presencia de droga en la actual “zona roja”, el concejal indicó que “las trabajadoras sexuales con las que vengo reuniéndome para convenir el proyecto aseguran que ellas no tienen nada que ver con las drogas, y además, ése ya es un problema de la ley, no municipal”, concluyó Ponce.

Ya son incontables los sectores de la Ciudad que se pensaron para relocalizar la “zona roja”. Se recuerda, por caso, una iniciativa que sugería trasladarla a 115 entre 54 y 60, pero la idea fracasó frente a la oposición de las comunidades educativas de los colegios Albert Thomas y Nuestra Señora del Valle que, junto con vecinos del barrio se movilizaron y consiguieron frenarla. Se habló - en 2014 - de ubicarla en el lugar en el que ahora vuelve a proyectarse - 52 desde 115 a 121 -, pero allí pusieron el grito en el cielo en aquella oportunidad los directivos y socios del Hípico La Plata y también entonces el proyecto se desestimó.